Las mejores lámparas para leer en la oscuridad

Son muchas las personas que, antes de irse a dormir, les gusta leer un libro tumbados en la cama. Sin embargo, por lo general, la luz de la lamparilla de noche o de la habitación suele molestar a otras personas que se encuentran en el mismo espacio y que ya están durmiendo.

Las lámparas de lectura específicas resultan ideales para estas situaciones. Sobre todo, aquellas que cuentan con un clip para instalarlas directamente sobre el libro o las que se colocan en el cuello, debido a que la luz se dirige de forma directa sobre las páginas. En EL PAÍS Escaparate hemos probado y comparado una gran variedad de modelos de lámparas de lectura y te contamos cuál ha dado los mejores resultados.

¿Qué modelos hemos elegido?

He seleccionado cinco modelos de lámparas para leer con clip diseñadas para colocarlas sobre el libro o en el cuello: Dokkita (con una puntuación media de 6,5 puntos); Electight (6,25); Glocusent (7,75); Gritin (9) y iZELL (8). Para probarlas y valorarlas, se han tenido en cuenta las siguientes características:

• Diseño y materiales: cuáles son los materiales con los que están fabricadas y si el diseño es ergonómico, no pesa mucho…
• Iluminación: qué tipo de iluminación ofrece, modos de color…
• Batería: autonomía, cómo se carga y consumo de energía.
• Experiencia de uso: si se ve bien en estancias a oscuras o con muy poca luz, si es fácil de colocar y utilizar, si protege los ojos…

Comparativa sobre las mejores lámparas de lectura

Las lámparas para leer seleccionadas y utilizadas en esta comparativa han sido probadas durante la noche, con ninguna otra lámpara de apoyo y para leer en libros de papel y electrónicos. La mejor lámpara ha sido la Gritin. Se coloca sobre las páginas del libro gracias a un clip resistente y cuenta con nueve luces LED con tres modos distintos de uso.

Lámpara para leer Gritin: nuestra elección y mejor calidad-precio

Disponible en varios colores, la lámpara para leer ganadora de esta comparativa es muy ligera y dispone de un clip antideslizante que se sujeta muy bien a las páginas del libro, aunque también resulta muy cómoda para colocarla en el cabecero de la cama o en la mesilla de noche, ya que es muy resistente. Cuenta con un cuello flexible de hasta 360 grados que permite colocarla como mejor convenga.

En cuanto a la iluminación, tiene nueve luces LED regulables en tres modos de color: mixto (con los 9 LED encendidos); blanco frío (con 5 LED) y cálido (con 4 LED). También se puede ajustar el brillo pasando del 100% al 10%. Ambas funciones se pueden controlar a través del botón de encendido y apagado realizando una pulsación más larga o más corta.

El modo cálido fue el que más utilizamos durante las pruebas ya que se usó en una habitación a oscuras evitando molestar a otras personas. Asimismo, con el ajuste del brillo al mínimo también se ven las páginas a la perfección. La luz no parpadea y tampoco proyecta sombras por lo que no se fuerzan los ojos incluso después de una hora y media de uso. Los otros dos modos resultan ideales para momentos en los que se necesita una luz más intensa, por ejemplo, para estudiar.

En relación a la batería, la lámpara de lectura Gritin es de 10.000 mAh y ofrece una autonomía de hasta 80 horas de iluminación con el ajuste de brillo más bajo (según el fabricante). Durante varios días de pruebas, y después de cargarla por completo (tarda unas 2 horas y media en hacerlo), con un cable USB que viene incluido de aproximadamente un metro de longitud, el porcentaje se quedó en el 75%.

El producto viene con cuatro indicadores luminosos que muestran en todo momento el estado de la carga de batería (25, 50, 75 y 100%).

Lámpara para leer iZELL: la alternativa

El producto tiene un cuello de cisne bastante largo (40 centímetros) que se puede girar hasta 360 grados. También dispone de un clip muy resistente con una abertura de hasta cuatro centímetros, ideal para colocarlo en mesas o libros un poco más anchos. La lámpara ofrece una forma redondeada y cuenta con una potencia de diez vatios. Tiene 23 luces LED y tres modos de iluminación: cálido (3000 K), cálido-frío (4500 K) y frío (6000 K).

Cada uno de estos modos tiene diez niveles para regular el brillo. Todo ello se controla cómodamente mediante una serie de botones situados en un display con el que se puede aumentar o disminuir el brillo, cambiar el modo de color o apagarla o encenderla. En este caso, durante las pruebas nos ha parecido que el mejor modo de color para leer era el intermedio ya que con ese se combinan las 12 luces LED de color blanco cálido y las otras 11 de color frío de las que dispone la lámpara.

Sin embargo, y probando los otros dos modos, ninguno de los tres (sobre todo el blanco-frío) molesta de forma exagerada cuando se está a oscuras. Ofrece una buena cantidad de luz, pero sin pasarse. El ajuste de brillo se hace de forma progresiva (y según la luz ambiental) y si se deja al mínimo es suficiente para leer.

En el apartado negativo, la lámpara de lectura iZEELL no cuenta con batería por lo que siempre tiene que estar conectada a la red eléctrica. El cable mide un metro y medio (ideal para la mesilla de noche pero algo corto si la queremos utilizar en otras circunstancias) y viene con un adaptador USB de 12V. No consume demasiado, unos 6,5 vatios si la ponemos a máxima intensidad. El controlador cuenta con una luz azul que indica que la lámpara está enchufada a la luz pero apagada. Esta luz solo se apaga cuando se enciende el dispositivo.

El producto viene con manual de usuario y existe otro modelo con el cuello de cisne un poco más largo, de 70 centímetros.

Lámpara para leer Glocusent

Este modelo es diferente al resto de dispositivos que he analizado ya que se coloca alrededor del cuello. Aunque tiene un diseño ergonómico que se adapta bastante bien, he podido comprobar que si se tiene colocado sobre el cuello durante mucho tiempo da sensación de pesadez y puede llegar a tensionar un poco los músculos. Cuenta con dos brazos flexibles que permite guardarla en cualquier sitio.

Estos disponen de dos pequeños focos que ofrecen tres modos de color y seis niveles de brillo (para cada brazo). Tanto los modos de color como el brillo se controlan a través de dos botones situados en cada uno de los brazos. De los tres modos (amarillo, blanco-cálido y blanco-frío), para leer el más adecuado es el amarillo, de 3000 K, debido a que ofrece la cantidad de luz suficiente para ver las páginas del libro a la perfección.

Asimismo y debido a su diseño, la lámpara de lectura Glocusent ofrece un ángulo de 90 grados dirigido a no molestar con la luz a ninguna persona que se encuentre alrededor.

La batería, de 1.000 mAh, dura bastante (de media, unas tres horas) aunque si se hace uso del modo cálido y de un nivel de brillo bajo puede durar varias horas más. La lámpara viene con un cable USB tipo C aunque no incluye el adaptador de corriente. Para cargarla y que funcione correctamente resulta fundamental utilizar el cable incluido en la caja.

Lámpara para leer Dokkita

Es bastante flexible e incluye dos clips o pinzas para utilizarlas para leer un libro de papel o electrónico (que no cuente con luz incorporada). También dispone de un imán para colocarla en cualquier lugar si se quiere utilizar como lamparilla de noche o, incluso, como linterna. En nuestro caso, la utilizamos tanto con libros de papel como ebooks.

Ambas pinzas, de metal para papel y de plástico para libro electrónico, son resistentes y se acoplan bien, no obstante, cuando se coloca en un libro de papel es bastante más incómodo ya que es necesario retirar la pinza si no queremos que se arruguen las páginas.

En ebooks no hay ningún problema. En cuanto a la iluminación, dispone de tres niveles de color que se manejan con el único botón que cuenta la lámpara: cálido, blanco y blanco-cálido que va desde los 3.000 hasta los 5.500 K. Para cambiarlos tan solo hay que realizar una pulsación corta y también se puede regular el nivel de brillo (de 15 al 100%). Para esto último cuenta con memoria, por lo que si se pone al mínimo o al máximo, se queda guardado aunque se cambie de color o se apague.

Durante las pruebas, y teniendo en cuenta que se hicieron en una habitación sin ninguna otra luz de apoyo, el nivel de color más adecuado ha sido el blanco o el blanco cálido ya que ofrecía una mayor iluminación independientemente del tamaño de la letra o el color de la página. Incorpora una batería con una capacidad de 230 mAH que se carga a través de USB.

Un aspecto que no me ha gustado es que en el manual de usuario no indica exactamente cuál es la parte de la lámpara por la que se carga ya que la interfaz USB se encuentra en la parte de la pinza, que hay que retirar o subir previamente y no se ve a primera vista. Tardé unos minutos en encontrar el puerto. Una vez enchufada la lámpara de lectura Dokkita, se ilumina un piloto en color rojo que se apaga cuando finaliza. Tarda una media hora y tiene una autonomía de unas tres horas.

Lámpara para leer Electight

Equipada con 14 luces LED y dos cabezales ajustables hasta 180 grados, la lámpara de lectura Electight dispone de tres niveles de color y hasta ocho modos diferentes de brillo. La iluminación en general es baja y aunque resulta ideal para no producir molestia en los ojos, en situaciones muy oscuras se queda un poco corta.

También cuenta con un cuello de cisne flexible fabricado en silicona al que se le puede dar la vuelta hasta 360 grados que resulta muy cómodo para dirigir la luz y también para plegarla y llevarla en la mochila o en el bolso.

La pinza para colocarla en los libros o sobre la mesilla o el cabecero tiene una abertura máxima de cuatro centímetros y una base antideslizante que no raya los muebles ni aplasta las páginas. Se controla a través de una interfaz táctil con tres botones y unos indicadores luminosos que muestran cuánta batería tiene en cada momento. Con una batería de 1.000 mAh, se carga al completo en unas dos horas y media y ofrece bastante autonomía con el nivel de brillo más bajo.

*Todos los precios de compra incluidos en este artículo están actualizados a 18 de marzo de 2024.

[Recuerda que si eres usuario de Amazon Prime, todas las compras tienen gastos de envío gratuitos. Amazon ofrece un período de prueba gratuito y sin compromiso durante 30 días.]

Puedes seguir a EL PAÍS ESCAPARATE en Facebook e Instagram, o suscribirte aquí a nuestra Newsletter.