Cena en el Nou Manolín

Antonia San Juan lleva diez años sin bajarse del escenario. La actriz, que representa De cintura para abajo en el teatro Bellas Artes de Madrid (hasta el 10 de junio), se fue dos semanas a San Juan, en Alicante; "con las cholas , unas revistas y a buscar playas desiertas".

¿No es demasiado de los noventa?

Me encanta esa agua caldosa del Mediterráneo, tan cálido. Además, en Alicante, si te lo montas bien te lo puedes pasar de escándalo.

Ilústrenos.

De vacaciones soy muy diurna; en la ciudad ya vivo el barullo de los estrenos, las fiestas y las presentaciones. Nos levantábamos temprano, unas carreras por la playa y a la hamaca con la Vogue. En la toalla, vuelta y vuelta...

Cuando empieza a picar el sol vamos a la zona de Torreblanca para tomar el aperitivo en el Lorea, donde hacen una de las mejores ensaladillas rusas que he probado.

¿No está saturado?

Hay gente, pero no es tan masivo. Además, nos encontramos a bastantes amigos como Fele Martínez o el director del Festival de Cine de Alicante, Vicente Seba.

No me diga que las 'celebrities' se escapan a Torrevieja.

Había ambientazo en la zona. Además, el casco antiguo de la capital es un lujo. En el mercado central se mezcla la arquitectura de principios del siglo XX de Juan Vidal Ramos con las murallas del XVIII. Recorrerlo por el día es un placer, y por la noche, arte en El Tossal de Manises, la ciudad romana de Lucentum; en una velada vimos el ballet de Víctor Ullate, y otro día actuó El Brujo.

¿El mojito también lo tomaron en la antigua villa?

Primero cenamos en el Nou Manolín [www.noumanolin.com], donde hacen unas berenjenas con salmorejo deliciosas. Para las copas nos íbamos a Altea, a un local donde tienen pipas de agua.

¿Qué fumaron?

Tabaco de fresa.

¿Cuántas paellas se tomó?

Todas las que hacía mi suegra, que, no hace falta decirlo, son espectaculares.

No se le ocurra opinar otra cosa. ¡Ni loca! La escapada fue gracias a mis suegros, que viven allí y le regalaron una de las plantas de su casa a mi marido. No habíamos tenido tiempo de ir hasta este último verano.

Sin duda, vive un idilio con el sol y la playa españolitos.

Tuve un revival de la adolescencia. He estado en lugares de todo el mundo, pero nunca me he relajado tanto; fueron Las Vacaciones.