_
_
_
_
VAMOS A... PLAYAS REMOTAS

10 islas para el invierno

Nadar entre tiburones de agua dulce, conocer a los descendientes del motín del Bounty, bucear en torno a catedrales de coral o aprender cómo se vive en un atolón perdido en el Pacífico sur.

Olvidarse de abrigo, guantes y gorro es posible cuando el mercurio comienza a descender vertiginosamente en el termómetro. Desde propuestas cercanas y asequibles en Canarias, a las más increíbles excentricidades en Dubai, ruta contra el frío en archipiélagos que mezclan lo idílico, lo remoto y lo curioso.

01 Planisferio flotante en Dubai

¿Se imaginan comprar, pongamos, Italia entera para veranear cuando les plazca? Pues es posible. Basta con reunir uso cuantos millones de dólares y hacerse con uno de los islotes que confeccionan The World, un complejo de 300 ínsulas artificiales que, vistas desde el aire, confeccionan un gran planisferio flotante. La última excentricidad proveniente de Dubai, obra de Nakheel Properties, ofrece hasta cuatro tipos distintos de islas, según tamaño y grado de privacidad. No se demoren. Shangai ya fue vendida a un "prominente empresario" chino y en la Red se rumorea que Rod Steward ya se ha hecho con Gran Bretaña.

Más información
Este verano me alquilo una isla
En una isla por menos de 70 euros la semana

www.theworld.ae

02 Paradisiaca, descatalogada, prohibitiva

Como bien reza su web, Bonefish Cay está en venta: "nuestra isla privada, puede ser su isla privada". Basta con una quincena de millones de dólares. Este resort vacacional, situado en Abaco Islands (Bahamas), también ofrece escapadas de súper lujo en dos villas a prueba de huracanes caribeños con ocho suites dobles, embarcadero y barcos propios a disposición de los huéspedes y un lodge principal donde se degustan cuidados platos en exquisita porcelana (ojo, el chef supone un extra).

Largas playas de arena fina, snorkel en un arrecife de coral al norte de la isla, pesca submarina, un frondoso interior donde observar pelícanos y otras aves exóticas, navegar sobre cristalinas aguas a cayos cercanos como Spanish Cay, el ambiente urbano de Marsh Harbour, jugar 18 hoyos en Treasure Cay... ¿No resulta tentador?

www.bonefishcay.com

03 Islas vírgenes Pitcairn

De chiste fácil para los devotos de Chiquito de la Calzada, se trata del país menos poblado del mundo -no llega a cincuenta habitantes- y posiblemente de los más apartados, por mera cuestión logística: el aeropuerto más cercano está a dos o tres días a bordo de un barco mercante. Este remoto archipiélago de cinco islotes en el Pacífico Sur, bajo protección británica, tiene historia: es conocido gracias al motín del Bounty, en el XVIII. En Pitcairn, única isla habitada, todavía quedan descendientes de aquellos insurgentes marineros.

Rutas en quads, snorkel y submarinismo entre restos del naufragio del SS Conwallis, avistamiento de aves, recorridos de senderismo por el interior de la isla y sus impresionantes cuevas, una sesión de masaje polinesio y esa indescriptible sensación de estar en el fin del mundo...

www.visitpitcairn.pn

04 La vida en un atolón

Los incansables pasos de nuestro experto de viajes, Paco Nadal, descubren Rangiroa, "un atolón del archipiélago de las Tuamotu (uno de los cinco que componen la Polinesia Francesa), a unos 400 kilómetros (una hora de vuelo) de Tahití". En realidad se trata de uno de los atolones (islas con forma de gigantescos anillos coralinos) más grandes del mundo, cuya alargada laguna interior alcanza los 78 kilómetros de longitud.

Una propuesta relajante y sencilla, que se aleja de los grandes resorts turísticos y apuesta por una pensión familiar en la que conocer cómo viven los habitantes de estas islas perdidas en los mares del sur: "una cabaña con techo de paja, paredes de madera y una tarima elevada sobre pilotes. Desayuno y ceno con los dueños y sus cuatro hijos. A veces voy con Norbert a ver los delfines en el paso de Tiputa o me enseña cómo prepara el atún crudo y la leche de coco para la cena". ¿Algún aliciente más?: sensacionales fondos marinos, la Laguna azul y playas de arena rosada, caminos de coral entre Tiputa y Avatoru, o una visita a los cultivos de perlas negras.

www.tahiti-tourisme.es

05 Trekking acuático en Nueva Zelanda

De playa en playa durante tres días y 51 kilómetros de puro disfrute. El tramping (trekking a la neozelandesa) a lo largo de la costa en el Parque Nacional de Abel Tasman, isla sur de Nueva Zelanda, combina un puzle de blancos arenales en medio de un mar de azul intenso, cabos de caóticas y fotogénicas formaciones graníticas para atardeceres perfectos, snorkel y buceo en aguas cristalinas o descansos para darle al kayak, por ejemplo hasta la cercana isla de Tonga.

El Abel Tasman Coast Track, que puede realizarse íntegramente en kayak o water taxi, atraviesa zonas de bosque autóctonos para quienes gusten del avistamiento de pájaros, cuenta con cabañas y zonas de acampada para dormir al borde del mar (reserva previa obligada), y también con curiosos compañeros de camino como osos marinos, delfines o pingüinos azules.

www.doc.govt.nz

06 Una isla de agua dulce

Su particular ubicación le valió una nominación a las Siete Maravillas Nacionales del Mundo: la Isla de Ometepe es una de las más grandes del mundo bañadas por agua dulce. Se levanta en medio del enorme Lago Nicaragua, llamado la Mar Dulce por el conquistador español Gil González, quien creía estar frente al Pacífico hasta que vio a uno de sus caballos bebiendo en la orilla.

Dominada por los volcanes Concepción y Maderas, sus playas de agua dulce y arena negra -como la de Santo Domingo- se alejan de la típica estampa caribeña, y cuentan con el emocionante o espeluznante atractivo (según quien lea) de la importante colonia de tiburones toro que nada en ellas.

A pesar de esta inquietante compañía, estos arenales conforman uno de los grandes atractivos de la isla, junto al llamado Ojo de Agua, un manantial natural de aguas cristalinas que emanan en la finca Tilgüe, en cuyos bosques habitan mandas de monos congos y que pueden recorrerse con excursiones a caballo desde Playa Santo Domingo.

www.visitaometepe.com

07 Si Elvis está vivo...

...está en Hawaii. El archipiélago estadunidense (50º estado de la Unión desde 1959), tierra de alohas, collares de flores y paraíso indiscutible para el surfing, fue un destino vacacional predilecto para El Rey, además del escenario de tres de sus películas. Para los menos devotos del mito de Graceland y emblema del rock and roll, hay muchos más atractivos en estas seis islas del Pacífico Norte.

Por ejemplo, en Kauai, recorrer Waimea canyon, el Gran Cañón del Pacífico y sobrevolar en avioneta los increíbles escenarios de Napali Coast. O disfrutar de la actividad del Kilauea en el Parque Nacional de los Volcanes en la Isla grande de Hawaii. Procurar no marearse durante las 600 curvas y 54 puentes de la fotogénica Hana Highway de Maui para deleitarse con sus impresionantes panorámicas, jugar con los delfines en Hulopoe Bay, isla de Lanai, o embarcar en el USS Missouri, atracado en Pearl Harbour (Oahu), en cuya cubierta se firmó la rendición formal por parte de Japón a las Fuerzas Aliadas el 2 de septiembre de 1945.

www.gohawaii.com

08 Recién casados y catedrales de coral

Aunque sea destino habitual de parejas de recién casados -quizá sus extensas playas paradisíacas alejadas del continente tengan algo que ver-, el verdadero atractivo de la isla mexicana de Cozumel está bajo el mar. La gran Barrera Maya de Coral, considerada la segunda más importante del mundo, se despliega sumergida a lo largo de su costa oeste, y es una especie de Meca para submarinistas de todo el mundo.

Bendecida catódicamente por el insigne Jacques Cousteu en 1961, los arrecifes de Palancar, Santa Rosa y El Cedral ofrecen jardines de coral a solo unos pasos de la playa. Buceo incomparable en aguas de gran visibilidad y para todos los niveles: snorkel, cursos de iniciación al submarinismo y paraísos para expertos, como los túneles llenos de vida de la Garganta del Diablo.

www.islacozumel.com.mx

09 Alcatraz a la brasileña

Ilha Anchieta, pequeño islote situado frente a la localidad de Ubatuba (Brasil), pasó de ser una ínsula carcelaria -una especie de Alcatraz a la brasileña-, a una reserva natural protegida. Entonces era la Ilha dos Porcos, hasta que fue rebautizada en homenaje al jesuita canario José de Anchieta, quien dedicó su vida a los pueblos indígenas.

Los restos del viejo presidio dan una peculiar bienvenida al viajero. Levantado a principios del siglo pasado, albergó primero a reclusos comunes y desde 1928 a presos políticos. Desmantelada en 1952, tras un sangriento motín, hoy es considerada una reliquia histórica de Brasil.

La actual condición de la isla como Parque Estadual da Ilha Anchieta ha permitido la protección de sus increíbles playas -como Praia Grande o Praia do Sul- y sus ricos fondos marinos, que la convierten en una privilegiada zona para el buceo contemplativo (la pesca submarina está prohibida).

www.ilhaanchieta.com.br

10 Un Caribe más cercano

No hay que cruzar un océano entero para disfrutar de una estampa caribeña. En dos horas y media de vuelo un intenso azul turquesa anuncia al viajero la eterna primavera canaria. Lanzarote y Fuerteventura, dos islas que mezclan volcanes, desierto y playas de postal, como el cinematográfico arenal de Famara o los surferos Lagos de El Cotillo, seducen ademáspor su gastronomía, sus parques nacionales, reparadoras propuestas para el relax o la casa de Lawrence de Arabia.

www.turismolanzarote.com | www.corralejograndesplayas.com

Submarinismo junto a un delfín en Bahamas
Submarinismo junto a un delfín en Bahamas
Isla con forma de palmera en medio del golfo pérsico (Dubai)
Isla con forma de palmera en medio del golfo pérsico (Dubai)
Panorámica del atolón Rangiroa, en las islas Tuamotu (Polinesia Francesa)
Panorámica del atolón Rangiroa, en las islas Tuamotu (Polinesia Francesa)PACO NADAL

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_