_
_
_
_
_

Jennifer Lawrence, sobre su prometido: “En cuanto le conocí supe que quería casarme con él”

La actriz, que asegura que es "demasiado vaga" para agobiarse con su boda, reconoce que lo que le ocurrió con Cooke Maroney fue amor a primera vista

Jennifer Lawrence, en el estreno de 'Dark Phoenix', en Hollywood, el pasado 4 de junio.
Jennifer Lawrence, en el estreno de 'Dark Phoenix', en Hollywood, el pasado 4 de junio. Axelle/Bauer-Griffin (FilmMagic)
Más información
El fin de la soltería de Jennifer Lawrence, una de las novias de América
Jennifer Lawrence da por finalizado su año sabático y vuelve a rodar
Jennifer Lawrence se compromete con Cooke Maroney

Jennifer Lawrence supo que su novio y actual prometido, Cooke Maroney, era el hombre de su vida desde el primer día que lo conoció. Así lo ha asegurado la actriz, quien no acostumbra a hablar de su vida privada, en una entrevista con Catt Sadler para el podcast Naked, emitido el pasado jueves. “Es la mejor persona que he conocido. Sé que suena realmente estúpido, pero es así. Me siento muy honrada de convertirme en señora Maroney”, revela.

Lawrence, de 28 años, y Maroney, de 34, se conocieron el año pasado gracias a que una de las mejores amigas de la actriz, Laura Simpson, les presentó. Desde entonces no se han separado y fue el pasado mes de febrero cuando se supo que la protagonista de Los juegos del hambre se había comprometido con el prestigioso galerista. Algo que pilló por sorpresa hasta a la propia actriz. “Era un momento de mi vida en el que no estaba ubicada, no me consideraba preparada para casarme. Pero fue conocer a Cooke y ya quería casarme con él. Los dos queríamos comprometernos plenamente. Él es mi mejor amigo, así que quiero vincularlo legalmente conmigo para siempre”, explica Lawrence. “Encuentras a tu persona favorita en el planeta y dices: ‘No puede irse’. Afortunadamente, existe el papeleo para estas cosas”, añade en tono de humor.

Al ser preguntada por su boda, de la que se desconoce la fecha y el lugar, la intérprete asegura que todo ha sido “muy fácil”. “No me he puesto nada neurótica planeando la boda. Creo que soy demasiado vaga para eso. Vi un vestido que me gustaba y dije: ‘¡Ese es el que quiero!’. No busqué mucho. Y con el lugar donde voy a celebrarla igual. Lo vi, me encantó y lo reservé”, afirma, sin desvelar más detalles.

Jennifer Lawrence y su prometido, Cooke Maroney, en Nueva York, el pasado mayo.
Jennifer Lawrence y su prometido, Cooke Maroney, en Nueva York, el pasado mayo. GTRES

No ocurrió lo mismo, sin embargo, con la despedida de soltera. “Al principio no quería despedida, pero en el último minuto me di cuenta de que sí”, explica la actriz. “Pero claro, nadie estaba disponible para celebrar porque lo decidí muy tarde y empecé a llorar sin saber por qué. No sabía que deseaba tanto tener una despedida de soltera. Me sentía patética. Menos mal que mi futuro marido me dijo que no había razón para ello”, sentencia. Finalmente, la novia tuvo su celebración, aunque más que una despedida de soltera al uso se trató de una fiesta de compromiso. El pasado 11 y 12 de mayo la pareja decidió reunir a sus familiares y amigos, entre los que se encontraba la actriz Emma Stone, y disfrutaron juntos de un fin de semana en Nueva York.

La cuatro veces nominada al Oscar y una vez ganadora de la estatuilla —por El lado bueno de las cosas, en 2013— decidió tomarse un respiro de Hollywood el año pasado para centrarse en sí misma, algo que, dice, le ha sentado muy bien. “Este último año ha sido muy saludable y satisfactorio, porque pensaba que si no trabajaba me iba a deprimir, y no fue así. Encontré otros intereses y realmente llegué al fondo de las cosas que realmente me apasionan y que no tenían que ver con la interpretación. Siento que me he conocido a mí misma”, cuenta. Ahora, después de casi un año alejada de la actuación, Jennifer Lawrence ha vuelto con más fuerza que nunca en lo profesional, con varias superproducciones como X-Men: Fénix Oscura y la serie Bad Blood, como en lo personal: “Fue genial. Conocí a alguien, me enamoré y comencé una nueva vida en Nueva York”.

Maroney, que procede de una familia de granjeros, es un galerista con sede en el Upper East Side, en la zona este de Manhattan (Nueva York, Estados Unidos). Fundada en los años noventa por Barbara Gladstone, marchante de arte y productora de cine, su galería representa a artistas como el escultor británico Anish Kapoor, el suizo Ugo Rondinone, el realizador de vídeos Matthew Barney (pareja de la artista Björk) o el pintor Carroll Dunham, padre de la actriz, directora y guionista Lena Dunham.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_