Una Disneylandia para adultos
Ushuaïa es un superhotel de cinco estrellas, pero también el club al aire libre número uno en Ibiza
En el vuelo a Ibiza se palpa cierta emoción. Niños bien con ganas de portarse mal pueblan la clase business. Tres metros más allá, la mezcla de familias, gogós, modelos en chanclas, despedidas de soltero/a y guiris ansiosos se antoja como una buena metáfora de lo que uno encontrará en la isla en verano. Ushuaïa, el hotel que nos ha invitado a experimentar su célebre mezcla de lujo, hedonismo playero, música electrónica diurna y fans famosos (Kylie o DiCaprio son habituales), no se hace esperar.
Está a menos de diez minutos en taxi del aeropuerto, en medio de la acción, en Playa d’en Bossa, y justo frente a Hï (el antiguo Space), que tras su suntuosa reforma es hoy probablemente el club más moderno del mundo, perteneciente además a los mismos propietarios (traducción: entrada gratis para los huéspedes). Sus 415 lujosas habitaciones y suites se dividen en dos atmósferas: para los más fiesteros, The Ushuaïa Club, con vistas al escenario, y para los más tranquilos, The Ushuaïa Tower.
Todos se dan cita en el desayuno más pantagruélico de la isla, un buffet de opciones infinitas regado de mimosas y smoothies, dependiendo del nivel de resaca. Además, un steakhouse, un oyster bar, un restaurante de playa y un japonés completan la suculenta oferta gastronómica. Ushuaïa no es barato, pero como las mejores travesuras, merece vivirse al menos una vez en la vida.