10 fotosLos bisnietos de los esclavosLa historia desconocida de una comunidad olvidada del golfo Pérsico los afroiraníes. Este es un recorrido por el redescubrimiento de sus tradiciones en la ciudad costera de BushehrEl PaísBushehr - 10 sept 2018 - 00:35CESTWhatsappFacebookTwitterBlueskyLinkedinCopiar enlaceVista de la costa de Bushehr desde el pequeño puerto pesquero de la ciudad.Un pescador descansa delante de un garaje tras una dura jornada de trabajo. Al igual que muchos otros puertos del Golfo, este enclave experimentó una rápida expansión y un nuevo periodo de desarrollo en la segunda mitad del siglo XX gracias a la abundancia de recursos naturales.Adham delante de la casa en la que vive con su familia en el barrio de Behbahani. Como ocurre en todas las ciudades ricas en recursos naturales, los habitantes de Bushehr luchan contra la pobreza mientras la riqueza de la región se envía a lugares desconocidos para los ciudadanos corrientes.Ali, uno de los habitantes del barrio de Behbahani, bebe té en una pequeña habitación situada fuera de su casa en la que preparar kebabs para vender y que a veces utiliza para descansar en los días calurosos. Ali lleva varios años dirigiendo un grupo de música tradicional formado por jóvenes afroiraníes y originarios de la ciudad.Parte del grupo Bambassi durante una actuación en el local que utilizan para ensayar. Un día sí y uno no, el grupo ensaya en un pequeño almacén público. Las mujeres, tantas veces excluidas en las mezquitas de Irán, aquí se encuentran más cómodas. Celebran sus propios rituales, muchos de los cuales incluyen canciones, y a menudo el culto lo dirigen otras mujeres de origen africano. Un anciano conocido en la ciudad de Bushehr como el Maestro del damam, sentado en su casa junto a su mujer y su nieta. En la ciudad, la ashura (la época en que los musulmanes conmemoran el martirio de Husein, nieto del profeta Mahoma), se celebra en un ambiente festivo en el que grandes grupos de músicos tocan para una multitud encantada.Un pescadero afroiraní en el bazar central de Bushehr. A diferencia de otras etnias, la comunidad africana jamás ha llegado a ser visible en Irán.Ali, que se dedica a vender bebidas, falafel y cigarrillos junto a la costa, en Bushehr, prepara su herrumbroso carrito. Ali cena en su casa con su familia tras una larga jornada de trabajo.