‘Homo taxis’
Siempre quise saber si el Homo neanderthalensis, ante la llegada del sapiens, comprendió que este significaba el fin de su especie; y ahora me pregunto lo mismo respecto al homo taxis frente al VTCensis. A juzgar por la incívica, matonesca y a ratos brutal protesta que han montado, me temo que así es. Los taxistas han perdido la cabeza porque intuyen que tienen perdida la guerra, y este secuestro de las ciudades, mal llamado “huelga”, es la reacción desesperada, aunque no justificada, de quien sabe que su viejo oligopolio se acaba. Pues muchísimo me alegro. El lobby del taxi lleva décadas enriqueciéndose merced a sus indisputados privilegios, a costa de unos pasajeros que pagamos un servicio en general sobrepreciado, y en alguna ocasión fraudulento. Pero la competencia ha llegado a ese sector, y no podrán detenerla. Más aún: tratar de hacerlo con mamporros y vandalismo callejero es poco menos que suicidarse. No sé si el neanderthalensis fue tan agresivo en su declinar, pero el homo taxis se está luciendo; y como muchos usuarios no recompensamos —al contrario que el Gobierno— la delincuencia ni la coacción, a partir de ahora cogeremos VTC. El taxi, a adaptarse o a extinguirse.— Pablo Alejandre Calviño. Azuaga (Badajoz).
