Las cinco noticias clave del 14 de diciembre

La Guardia Civil registra la sede de Unipost en L’Hospitalet por el referéndum. Unipost, que se encuentra en concurso de acreedores, fue la empresa utilizada por la Generalitat para difundir propaganda y documentos electorales para la celebración del referéndum de independencia. Están previstos otros registros además de detenciones vinculadas al papel de la empresa de mensajería en el 1-O.

El acoso a los partidos contrarios al 'procés' enturbia la campaña. Las sedes de Ciudadanos han sido atacadas este año 14 veces, las de los socialistas, una decena, y los candidatos constitucionalistas han recibido amenazas e insultos de alto calibre en las redes y en actos públicos. Expertos consultados hablan de una sociedad “polarizada como nunca” y unos episodios que son “antesala” de la violencia de baja intensidad.

Altos cargos de Chávez ocultaron en Andorra más de 2.000 millones. Exviceministros y testaferros de políticos del Gobierno de Venezuela durante la presidencia de Hugo Chávez (1999-2013) cobraron presuntamente comisiones ilegales de hasta el 15% por intermediar para que compañías extranjeras consiguieran adjudicaciones de la principal firma estatal, Petróleos de Venezuela. 

Salma Hayek revela la tortura de trabajar con Weinstein: "Fue mi monstruo". La actriz mexicana se suma a los testimonios de grandes actrices que han revelado en los últimos dos meses los abusos sexuales que intentó o consumó Harvey Weinstein, uno de los productores legendarios de Hollywood.

Dimite la máxima responsable de los funcionarios del Ayuntamiento de Madrid. Carmen Román, gerente de la Ciudad en el gobierno de Ahora Madrid, pertenecía al núcleo duro de la regidora, Manuela Carmena. Era la máxima responsable de los 25.500 funcionarios del Consistorio y también de la asesoría jurídica municipal. Fuentes municipales explican que se debe a “razones personales”, aunque otros hablan del “cansancio” ante algunas situaciones de política interna.

Un crimen por los colores de una bandera. Conmoción por el brutal ataque en Zaragoza a Víctor Laínez, un hombre de 55 años que murió tras ser agredido por llevar unos tirantes con la bandera española. Su presunto agresor, el ultraizquierdista Rodrigo Lanza, ya había mostrado aversión por la rojigualda.