Este es el ilustrador español detrás del nuevo disco de Weezer
El líder del grupo estadounidense descubrió de casualidad el diseño del cántabro Fran Rodríguez y no paró hasta conseguirlo como portada de su álbum 'Pacific Daydream'
Obsesionado con la astronomía y toda la iconografía espacial, el diseñador Fran Rodríguez (Cantabria, 1980) desafía la gravedad en cada uno de sus trabajos. El espacio y la naturaleza inspiran todos los collages que firma como Lacabezaenlasnubes. Astronautas, planetas, figuras anónimas y elementos inquietantes que no atienden a leyes físicas, componen su mundo. Un pastiche bañado en la psicodelia y pasado por muchos filtros de estética retro.
El universo también es su vía de escape. "Me he dado cuenta de que lo que me gusta es el aislamiento y escapar. El hecho de salir del planeta me parece una metáfora de escapar de la vida, del trabajo, la familia... Yo soy un poco así. Soy una persona sociable, tengo pareja y una familia normal, pero me gusta estar solo". Así es como trabaja en su estudio de Barcelona -después de pasar por agencias y de colaborar con marcas-, totalmente aislado y con un hilo musical sin sobresaltos. "Para trabajar escucho sobre todo ambient y música instrumental. Canciones que duran mucho, apenas tienen subidas y bajadas, o con algún loop repetido mil veces".
Dice que siempre ha sido un poco vago como para aprender a tocar ningún instrumento, pero que no podría vivir sin música. De algún modo ha conseguido resarcirse uniendo ambas facetas. Sin ir más lejos, la portada del nuevo disco de Weezer, Pacific Daydream, es suya. ¿Que cómo ha llegado hasta ahí? Él tampoco lo tiene muy claro.
Astronautas, planetas, anónimos decapitados, columpios... ¿Cómo describirías tu trabajo?
Me gusta pensar que mis mayores influencias son la psicodelia y el surrealismo. Pero no la típica psicodelia de colorinchissesenteros con flores y demás. Sino algo entendido como una posición mental frente a la vida, de buscar lo que hay más allá y no fiarse de lo que uno percibe. Busco crear imágenes que estimulen un poco su cerebro de quien las vea, que le hagan pensar en algo o les transporten a algún sitio diferente. No sabría describirlo, supongo que la explicación más academicista sería "collage surrealista", pero me gusta pensar que hago psicodelia, ayudar a la gente a que bucee en la cabeza.
¿Qué técnica usas a la hora de trabajar?
Es un collage digital con mucha pintura en photoshop, diferentes texturas y un color muy retocado y producido. Los archivos llevan cientos de capas porque soy bastante friki. Estoy obsesionado con las texturas o el grano de cada imagen. Parto de imágenes escaneadas previamente o recortadas online, y luego hago mucha pintura encima: sombreo, ilumino, texturizo. Intento expresar algo con cosas que me encuentro. De restos, crear algo nuevo.
¿Existe alguna relación entre tu nombre artístico, La cabeza en las nubes, y todos esos personajes decapitados que protagonizan tus trabajos?
Cuando era adolescente mis padres me regalaron un juego de óleos y lo primero que pinté fue lo que ahora es mi logo: la silueta de una luna en cuarto creciente con un tío colgando de ella. Cuando lo acabé pensé en esa expresión, "la cabeza en las nubes", y luego se me ocurrió utilizarlo más tarde como marca. Ahora que se ha hecho más grande y que me sigue gente de todo el mundo y es un cristo para ellos pronunciarlo, aunque me gustaría cambiarlo, ya no puedo. Pero expresa eso: estar siempre despistado, ensimismado en mis historias.
No tengo una explicación razonable a las figuras sin cabeza. Me gusta que sean anónimas, que se vea que son personas, pero que no sean nadie. Me gustan las siluetas de espaldas contemplando algo, o enfrentándose a algo, pero lo he hecho muy sin querer.
¿Cómo acabó esa niña en el columpio como portada del nuevo disco de Weezer?
Yo no lo sé muy bien tampoco. Fue uno de los primeros collage que hice cuando decidí montármelo por mi cuenta. Lo colgué en mi Facebook, que por aquel entonces tenía treinta seguidores y todos eran amigos, la gente me empezó a escribir y me di cuenta de que estaban dispuestos a gastar su dinero en cosas que había hecho yo. Este diseño lleva seis o siete años por ahí danzando y es la lámina que más he vendido y la que ha llegado a más gente.
"Es una metáfora de lo bueno que tiene Internet: cualquier pobre hombre de Cantabria que hace 'collages' puede llegar a los ojos de alguien grande y le puede solucionar unos cuantos meses de alquiler"
Hace un mes, más o menos, me llegó un email de un tipo de una empresa de management de Los Angeles y me dijo que una de las bandas de su portfolio quería comprarme los derechos del diseño para la portada de su nuevo disco. Cuando entré en la página pensé que sería de uno de sus grupos desconocido. Le pregunté para que grupo era para hacer un presupuesto y me dijo Weezer. Fue una locura, me puse nerviosísimo y ya no sabía que presupuesto pasarle. Y nada, intercambiamos cinco o seis emails con presupuestos, derechos, y demás papeleo americano y ya está. Todo esto ha sido en un mes, el vinilo está ya en la fábrica y sale en un mes.
El tema es que lo vio Rivers Cuomo por Internet. Al tío le gustan los collage, lo vio por ahí y dijo que lo quería en la portada de su disco. La verdad, es que ha sido muy guay. Es una metáfora de lo bueno que tiene Internet: cualquier pobre hombre de Cantabria que hace collages puede llegar a los ojos de alguien grande y le puede solucionar unos cuantos meses de alquiler.
¿Pero eras fan de Weezer o no?
Sí, sí, me gusta mucho. No soy un fan loco de discografía completa o discos enteros, pero todos los singles o discos que han sacado los he escuchado. Hay temazos fijos en listas que pongo en fiestas, o así. Pero no un fan de estos de revisión y, por lo que he visto, los hay. Me han estado mandando emails de gente que es muy fan.
Aunque este ha sido tu proyecto más internacional, no es el primer grupo para el que trabajas.
Sí, he hecho trabajos para Viva Suecia, o Muñeco y The last 3 lines que son de Barcelona. Son grupos que me gustan mucho y a los tres los contacté yo. Y ahora estoy trabajando en un proyecto para Dorian, pero no puedo decir nada todavía. También estoy trabajando con Pumuky (Jabalina), un grupo inglés y otro americano. O sea, que van saliendo cositas y todo relacionado con la música que era en donde quería enfocarme. A raíz de Viva Suecia me han ido contactando distintos músicos y sellos.
Antes me decías que huyes de las obligaciones. ¿Los plazos de entrega cómo los llevas?
Bien, la gente con la que trato son generalmente músicos o sellos, tienen deadlines muy flexibles. No son de agencias o marcas que te cortan el cuello o amenazan con no pagarte si no llegas al día. Aparte, aunque me pongo nervioso con los plazos, trabajo muy rápido al venir de agencia, y al final las cosas salen.
¿Qué artistas te han influenciado más?
Lo primero que se ve al ver uno de mis trabajos es el surrealismo, artistas como Chirico o Magritte. Y actuales, que igual son mis influencias más directas, diría Leif Podhajsky, que es un diseñador inglés de origen checo que ha hecho portadas míticas para Tame Impala y Foals; Neil Krug, que es un fotógrafo que ha hecho artes por ejemplo para Lana del rey, me flipa porque es un fotógrafo analógico que trabaja con polaroids y tiene unos acabados y unas texturas que me dan ganas de lamer la pantalla. Y no sé, así de memoria… Igual el cine me influye un poco más y, no quiero resultar pedante, pero la naturaleza es lo que más me inspira al final. Por ejemplo, en un día en el monte en Cantabria se me ocurre mil ideas. Me inspira mucho más que cualquier cosa que haya hecho una persona.
¿Dónde te gustaría ver uno de tus trabajos?
Me gustaría verlo en portadas de discos de artistas que me flipan, como Spiritualized o Beach house. O en la portada de algún libro. Más que una exponer en algún sitio, quiero vincular mi diseño a gente que hace arte. Básicamente eso.
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