Lapo Elkann reaparece solo y desmejorado un mes después de fingir su secuestro

Desde que el pasado 29 de noviembre Lapo Elkann fuera detenido en Nueva York por fingir su secuestro tras pasar dos días con una prostituta transgénero, alcohol y drogas, no había hecho ninguna aparición pública, ni siquiera había utilizado las redes sociales, en las que normalmente prodiga su vida de lujos y excesos ante más de medio millón de seguidores.

El nieto del fallecido patrón de la casa Fiat, Gianni Agnelli, reapareció el pasado 24 de diciembre en Portofino, al norte de Italia, un mes después de su detención, con una imagen muy desmejorada y nada habitual en él. Ambicioso y provocador, Elkann siempre ha cuidado el más mínimo detalle de su aspecto, a veces elegante, otras extravagante, pero siempre estudiado. Nada que ver con su aparición en solitario, con el rostro demacrado y con una herida en la frente que cubrió con una tirita que ha publicado la revista italiana Diva e Donna. Con las manos en los bolsillos, el gesto triste y pensativo y la mirada perdida, Elkann confirmó que estaba en Italia y sembraba dudas sobre su estado anímico. Acudió al funeral de la periodista Franca Sozzani, directora de Vogue, para acompañar a Francesco Carrozzini, hijo de Sozzani, y  buen amigo de Elkann.

Las fotografías dejan ver cómo ambos se abrazan cariñosamente y mantienen una conversación, pero el hijo de la fallecida es la única persona con la que Elkann fue fotografiado. El resto del tiempo se mantuvo solo y en silencio en la iglesia de San Jorge donde se celebró la ceremonia.

Si se mantiene su bajo perfil público y su ausencia en eventos, a los que era asiduo antes del altercado, su próxima aparición será el próximo 25 de enero en un juzgado de Nueva York. Tendrá que responder a la acusación de fingir un secuestro, que puede castigarse con entre dos y 10 años de cárcel. El diario italiano Corriere della Sera informó en el momento de la detención de que la familia de los Agnelli ya había puesto entonces en marcha a su equipo legal para intentar reducir al máximo la pena, que se conocerá dentro de pocas semanas. Además del castigo, también queda por saber si Elkann ha iniciado algún tipo de tratamiento de rehabilitación y cómo se levantará, de nuevo, para hacer frente a su último y más grave tropiezo.

Este último escándalo en Nueva York representa los peores tiempos del empresario de 39 años. Aunque es la vez que más lejos ha ido, no se trata de su primer altercado de este estilo. Ya en 2005 Elkann llegó al hospital Mauriziano de Turín con una sobredosis de cocaína que puso en riesgo su vida después de una noche de fiesta, de nuevo, con una prostituta transgénero. Fue el punto de partida para tomar las riendas de su vida, separarse del grupo Fiat familiar y montar su propio negocio de moda, Italia Independent Group que, hasta entonces, no había hecho frente a ningún escándalo y podía presumir de triunfar en 70 países.