Competencia desleal
Competir es natural. Natural y necesario, pues conlleva esfuerzo y mejora. Es natural que un equipo intente ganar y que un trabajador intente trabajar y que una tienda intente vender. Es natural que gane el equipo mejor organizado, el trabajador que mejor se ajusta al puesto y el producto que sea mejor y más barato. Si un equipo dopa a los jugadores para ganar, si el trabajador consigue el trabajo porque es sobrino del jefe y si el tendero vende más barato porque no paga impuestos, estamos ante una competencia desleal que no es buena ni deseable. Así no ganan los mejores. De la competición desleal no se deriva ni esfuerzo, ni mejora.— Martín Martínez Martínez. Barcelona.
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