9 fotosBienvenido a la junglaViajamos a Los Ángeles para descubrir a 10 espíritus inquietos que han sobrevivido a la capital de la Costa Oeste y no tienen ninguna intención de moverse de allíCarlos PrimoIñigo López PalaciosXavi Sancho19 ago 2016 - 12:40CESTWhatsappFacebookTwitterLinkedinCopiar enlaceNativo de Rhode Island, Gary Mantoosh es uno de los vicepresidentes de BWR Public Relations, una de las principales empresas de relaciones públicas de Los Ángeles y Nueva York. Su firma representa a actores de cine y televisión; estrellas de la música, diseñadores de moda y escritores de best sellers. Mantoosh es uno de los pocos habitantes de esta urbe que le ve ventajas a los atascos. “No me importa pasar tiempo en mi coche. Aprovecho para hacer llamadas y adelantar un montón de trabajo”, asegura. “Lo que más me gusta de esta ciudad es que puedes ir del distrito artístico a playas tan alucinantes como Malibú en una hora. Y hay tantas cosas que hacer y zonas que visitar que me resulta muy difícil elegir una”. Gary lleva traje y camisa, los dos, Burberry. Cinturón y corbata Hermès.John Russo“En la industria audiovisual de Los Ángeles hay más gente que proyectos, por eso es muy competitiva, pero en el buen sentido: el mejor se lo lleva”. El español Alberto Mielgo ha sabido llevárselo: en 2013 ganó un premio Emmy por su trabajo de Dirección Artística en Tron uprising (Disney) sin abandonar su labor como artista plástico. ¿Es fácil moverse entre dos mundos? “El del arte es exclusivo y está dominado por unas minorías que parecen entender lo que miran. En cambio, el mundo de la animación es excesivamente inclusivo, huele a juguete y a valores conservadores con los que no estoy necesariamente de acuerdo. Me gustaría no tener que compatibilizar, sino armonizar, y por eso intento cambiar cosas en la industria de la animación”. Alberto luce gabardina Burberry, jersey Diesel Black Gold, pantalón Dsquared2 y bufanda Bottega Veneta.John RussoLlegó a Los Ángeles en 1992 con una incipiente carrera de actor en la maleta. “En Argentina había hecho novelas, cine, anuncios y hasta una serie española, Tango, con Sancho Gracia y Javier Bardem”, recuerda Guillermo Zapata. La ciudad le enseñó pronto que, con sus mismas ambiciones, había cientos. Gente con los mismos sueños y los mismos problemas económicos, administrativos e idiomáticos. Entonces, Guillermo empezó una nueva vida. Desde abajo. “Mi primer empleo fue de lavaplatos en Melrose Avenue”. Hoy es el propietario de Sur, uno de los restaurantes más famosos de EE UU. Además, su éxito profesional le ha permitido retomar su carrera artística. Ha hecho anuncios, series y está a punto de rodar su primera película como protagonista: Cat’s revenge, de su compatriota Eduardo Pinto.John RussoCuando se vive en una ciudad tan perfectamente planeada para vivirla en la soledad de tu recóndito apartamento o frente al vacío existencial del enésimo atasco, sólo quedan dos opciones: morir de misantropía o convertirte en catalizador de inquietudes humanas. Esto último decidió Jesse Rogg, músico, productor y responsable de Mack Sennett Studios, uno de los espacios a los que acudir si se quiere saber qué va a pasar mañana en la escena musical angelina. “Esta ciudad es una de las mejores del mundo para trabajar en equipo”, señala. “La gente es mucho más amable y abierta que en sitios como Berlín o Nueva York. Además, hay mucho espacio y cada día surge un estudio de grabación nuevo donde antes había un garaje”.John RussoCanadiense de ascendencia italiana, Spencer Lofranco lleva cuatro años en Los Ángeles. En ese tiempo a este actor de 23 años le ha dado tiempo a trabajar con figuras consagradísimas como Andy García o Angelina Jolie, que le eligió como parte del reparto de Invencible, su drama bélico de superación. “Me siento muy agradecido de haber tenido la oportunidad de rodar con iconos tan respetados de la industria”, dice con extremo respeto. Natural de Toronto, Spencer ha descubierto en California los placeres del surf. “Disfruto estando en el océano, pero si no me encuentras en el agua, me hallarás en la playa de Venice. Pretendo seguir peleando por mi carrera, pero si lo dejara no creo que me alejase mucho de la orilla”. Spencer luce cazadora Levi’s y jersey Dries Van Noten.John Russo“Esta es una ciudad perfecta para diseñar. Hay espacio y naturaleza a un tiro de piedra, y me permite huir de vez en cuando del mundo, algo perfecto para seguir siendo creativo y consciente de mi evolución”. El diseñador de moda James Flemons creó su propia firma, Phlemuns, a partir de un proyecto de fin de carrera que hoy es un modelo para los alumnos de FIDM, la escuela angelina donde estudió. Fiel al signo de los tiempos, su trabajo habla de androginia y fusión entre géneros, “algo cada vez más aceptado entre el público general”. ¿No le tienta mudarse a la meca fashion de la costa atlántica? “En Nueva York impera la idea del look impecable”, responde. “Aquí la gente también viste bien, pero con cierto sentido del humor”. James luce camisa y chaleco, los dos, Prada. Pantalón Louis Vuitton, zapatos Calvin Klein y pulsera 1-100.John RussoCornelius Smith Jr. les sonará a todos aquellos que siguen Scandal, serie en la que ha interpretado a uno de los más fieles gladiadores de Olivia Pope. Sus orígenes, por dispares, son casi pura idiosincrasia de una ciudad construida por gentes venidas de todo el mundo con la idea de ser uno (que triunfa) en un millón (que fracasa). Nacido en San Diego, criado en Detroit, universitario en Dallas y debutante en el arte de la interpretación en Nueva York. Todo esto podría hacernos creer que este señor, que durante una época se ganó la vida como conductor de Uber, estaría algo desubicado en L.A. Pues nada más lejos de la realidad. “Vivo en el valle, porque me gusta estar cerca del meollo, pero no en el meollo. Y lo que más me interesa son playas como la de Hermosa o Manhattan y la tienda Babycakes Bakery. Allí los donuts son algo increíble”. Cornelius lleva traje Boss, camisa Calvin Klein y pañuelo Salvatore Ferragamo.John RussoComo somos malas personas, lo primero que le preguntamos a Jason Muirbrook al saber que se le conoce como el “entrenador personal de las celebridades” es si encuentra algún tipo de placer morboso en hacer sufrir a sus clientes. Él, que antes de operar en el gimnasio más demandado de Beverly Hills fue modelo para firmas como Calvin Klein o Guess, responde como sólo lo haría una buena persona: “Para mí, son gente como los demás. Sólo tratan de trabajar para lograr ser la mejor versión de sí mismos. ¿No es eso algo a lo que aspiramos todos?”. Suponemos que sí, del mismo modo que suponemos que la forma más popular de alcanzar esa versión ideal en una ciudad como Los Ángeles es cultivar los abdominales. “Esta ciudad siempre está preparada para probar lo último en salud. El bienestar es siempre un tema aquí”, confirma. Jason lleva chaqueta Tommy Hilfiger, camisa y chaleco Ermenegildo Zegna y vaqueros Diesel.John RussoLa clave para sobrevivir como fotógrafo en una ciudad atestada de fotógrafos consiste, para John Russo, en hacer como si el resto no existiera. “Nunca me han preocupado demasiado mis colegas de profesión. Simplemente hago lo que hago, y disfruto con ello”, explica este retratista especializado en celebridades y, pese a sus reticencias, cerca de convertirse él mismo en una. “Trato a los famosos del mismo modo que trataría a cualquier persona. Todo se basa en la confianza. Cuando ven que eres de fiar, te admiten en sus círculos”. Russo, cuyo primer encargo de altura fue una sesión con Josh Harnett en la playa de Santa Monica, alterna hoy sus trabajos en revistas de todo el mundo (entre ellas, ICON, cuya portada firma este mes) con proyectos propios, fotolibros y también su propia firma de cosmética. En resumen, su nombre es ya una marca en LA. John Russo, luce chaqueta de piel Hogan, vaqueros DIESEL, jersey BOSS y joyas Sheryl Lowe.Dustin Huntington y Mike Blumberg