Los adolescentes de Barcelona debaten sobre el turismo
Por Ernest Cañada de Alba Sud Entre los meses de enero y junio de 2016 unos cuarenta alumnos de 4º de ESO de la Escuela Jesuitas de Casp de Barcelona han realizado un proyecto de Aprendizaje y Servicio (APS) con el objetivo de promover el debate público sobre el turismo en la ciudad y entender cómo les afecta. El proyecto fue facilitado por las asociaciones Avalon, quien asumió la coordinación, Alba Sud, Fundació Guné y Sodepau. Contó con el apoyo del Ayuntamiento de Barcelona a través del Programa Barcelona Solidària y la asesoría pedagógica del Centre Promotor Aprenentatge Servei.El proyecto, siguiendo la metodología APS, propuso al alumnado la necesidad de su implicación activa para ayudar a promover una reflexión crítica, desde la perspectiva del turismo responsable, sobre los efectos positivos y negativos que está teniendo el turismo en Barcelona. También se les pedía apoyo para que contribuyeran a hacer llegar estas preocupaciones a su entorno cercano en el marco de un debate más amplio que se está generando en la ciudad sobre el turismo.
Paralelamente a este análisis algunos alumnos se dedicaron también a hacer otras tareas: dinamización del trabajo de investigación a través de las redes sociales; elaboración de un vídeo de presentación de los contenidos del proyecto; conceptualización y diseño de una exposición que mostrara la investigación realizada por cada comisión temática. También se seleccionó un grupo de chicos y chicas para intervenir en un debate con el que se cerraba el proyecto, y con ellos se trabajó durante varias sesiones en cómo documentar mejor su posición y cómo argumentarla.
Jornada finalEl día 6 de junio se realizó una jornada abierta y destinada principalmente al resto de alumnos de las cinco líneas de 4º de ESO de la misma Escuela, y en el que también participaron algunos padres y madres y algunas de las personas entrevistadas. Además de inaugurar y explicar la exposición se organizó un debate sobre algunos de los aspectos más controvertidos del turismo en Barcelona: impactos de los cruceros; costes y beneficios económicos del turismo en la ciudad; efectos en la convivencia de los apartamentos de uso turístico; y hasta qué punto compensa o no el fuerte crecimiento del turismo en la ciudad para la mayoría de la población.Al finalizar el debate se pidió al público asistente que respondieran por escrito cuáles creían que deberían ser las principales medidas para mejorar la gestión del turismo en Barcelona. En sus respuestas básicamente las ideas que predominaron fueron la necesidad de redistribuir mejor el turismo por toda la ciudad; favorecer mecanismos de decrecimiento turístico; mejorar políticas públicas en turismo e incrementar los mecanismos de control y seguridad sobre la actividad. Por su parte, Iago Rodríguez, uno de los alumnos participantes en el debate, al finalizar la jornada explicitó la necesidad de que se produjeran cambios en la forma de gestionar el turismo en la ciudad, sintetizando un estado de opinión bastante generalizado:
«Mi investigación consistía en valorar cómo es la convivencia entre turistas y vecinos en Barcelona. Y después de ver las opiniones de diferentes sectores está claro que hay una masificación turística y que la cosa no puede seguir así, y hay diferentes propuestas (decrecer, marcar un límite,...), y claro yo no tengo la solución final pero lo que me ha quedado claro es que tal y como lo estamos haciendo ahora no es el camino.» (Iago Rodríguez)
Primeras valoracionesConsultados algunos de los alumnos sobre qué pensaban de este proyecto de APS, se mostraron especialmente a favor de la metodología empleada:
«Pienso que este proyecto ha sido una buena manera de conocer este tema en profundidad, porque realmente era una cuestión en la que yo no había estado muy interesada y ahora sé muchas más cosas que son del día a día y que es bueno saberlas. Por ejemplo no sabía que el turismo tenía estas consecuencias y tampoco me lo había planteado mucho. Pero ahora veo, por ejemplo, qué ha pasado con Las Ramblas y me doy cuenta de que el turismo no siempre es tan bueno como nos enseñan en las noticias, que solo muestran la parte buena. Este es un tema que sale mucho en los televisión pero no todo el mundo está atento y la gente de nuestra edad tiene la cabeza en otras cosas, y el proyecto nos ha permitido acercarnos más a este tema y, ¿quién sabe?, para dedicarnos también a él.» (Marta Barros)
«Me ha gustado cómo hemos hecho el proyecto porque no era muy teórico y cada uno era autónomo y trabajaba por su cuenta, y luego lo poníamos en común. Yo creo que el proyecto ha sido muy positivo, porque durante estos meses hemos aprendido mucho sobre el turismo responsable. Y ahora con las entrevistas que hemos hecho a los vecinos, lo que hemos hablado con nuestros padres y nuestros amigos, lo vemos también desde un punto de vista más subjetivo. Es necesario saber sobre las cosas de la ciudad y del turismo, porque nuestro conocimiento sobre este tema era muy superficial, y al profundizar ahora lo vemos de otra manera. No vemos solo lo positivo si no también cómo perjudica a la sociedad. Al final el turismo es algo que nos afecta a todos, tengamos la edad que tengamos, y también nos afectará en un futuro. Y si las medidas que están tomando ahora las autoridades no dan fruto pienso que nosotros podremos proponer otras para solucionar los conflictos que hay.» (Raquel Ashby)
Por su parte, Ana Quirós, profesora de Formación Cívica, Ética y Filosofía, valora también positivamente la experiencia:
«Al principio no teníamos claro hacia dónde iría el proyecto y dónde queríamos llegar y se abrieron muchos temas, pero luego el resultado ha superado las expectativas. Pienso que hay una parte muy positiva de interrelación con la realidad y de este aprendizaje vivencial de los chavales, salir a la calle y preguntar, y luego llegar a conclusiones ellos mismos. Hay una parte que es más difícil de manejar, porque precisamente se basa en la participación, pues el ritmo de aprendizaje y de trabajo depende un poco de los chicos y eso a veces hace que las cosas no se hagan necesariamente en los plazos que te gustaría.»
Fotografías: Ernest Cañada
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
