La web de infidelidades Ashley Madison admite haber usado robots
La empresa utilizaba programas informáticos para crear perfiles falsos de mujeres
El usuario que acudía a la página de infidelidades Ashley Madison no sabía si por quien pagaba por chatear era una mujer real o un robot. No todos los perfiles eran verdaderos, detrás de algunos de ellos se encontraba un programa informático que creaba el fembot: la mujer robot. El uso de estos programas, que desapareció en 2014 en EEUU y en 2015 a nivel internacional según un informe, acaba de admitirlo la propia empresa Avid Life Media -a la que pertenece Ashley Madison- en un comunicado. Las explicaciones coinciden con el nombramiento de dos cargos nuevos: el CEO Rob Segal y el presidente James Millership. "Los robots se han generalizado en la industria, pero ya no se utilizan y no será utilizada en Avid Life Media y Ashley Madison", dice Millership.
La página de citas atraviesa por momentos difíciles tras la oleada de escándalos recientes. En 2015, la Guardia Civil abrió expedientes por extorsión que, en principio, eran realizados por piratas informáticos a clientes españoles. Ese mismo año, la empresa sufrió un ataque informático que expuso información confidencial de más de 30 millones de clientes, lo que originó la dimisión del responsable por el número de demandas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.