Michael J. Fox se despide de Muhammad Ali

A Muhammad Ali y Michael J. Fox les unió su lucha contra la enfermedad que ambos padecían, el Párkinson. "Antes de que me diagnosticaran Párkinson, ya lo admiraba. Admiraba su aplomo, su clase, su estilo, su estoicismo, su creencia en lo que sentía que era correcto y su disposición para aceptar las consecuencias de pie", ha dicho el protagonista de Regreso al futuro como despedida de su amigo boxeador, que murió el pasado viernes, por un choque séptico provocado por causas naturales no especificadas, según apuntó un familiar. 

Fue en 1984 cuando diagnosticaron la enfermedad a Ali; casi una década más tarde, le sucedió lo mismo a Fox. Ambos aunaron su fuerza para tratar de concienciar acerca de la necesidad de investigar en la cura del Párkinson. El intérprete y la leyenda del boxeo participaron juntos en varios anuncios para recaudar fondos para la fundación Michael J. Fox. 

"Era impresionante. Y después tuve la oportunidad de conocerle y de que nos uniéramos en una causa, en una lucha común. ¿A quién podrías querer más en tu esquina?", ha afirmado el intérprete, y continúa: "Una vez llamé a su mujer y le pregunté si él se entristecía o enfurecía cuando se veía en los vídeos antiguos de combates, joven, sin la enfermedad. Y me dijo que no, que le encantaba verlos". 

El día de la muerte de Ali, el artista tuiteó "Ali, the G-O-A-T. A giant, an inspiration, a man of peace, a warrior for the cure. Thank you" (Ali, el G-O-A-T. Un gigante, una inspiración, un hombre de paz, un guerrero por la cura. Gracias, en español). 

Tras la muerte del deportista, queda por resolver su herencia. Según la revista Forbes, Ali deja una fortuna estimada en 50 millones que se dividirían entre su viuda, Lonnie, y sus nueve hijos. Sin embargo, alguna de sus tres exesposas o su hermano, Rahaman Ali, podrían pedir parte de esa herencia, complicando así el reparto.