Hola, Europa

Ryanair, esa compañía aérea que molesta mucho a todos aquellos que tienen suficiente dinero como para jamás requerir de sus servicios, ha molestado esta vez a los partidarios del brexit. La aerolínea irlandesa de bajo coste ha puesto a la venta billetes desde sus destinos dentro de la UE hasta cualquier capital británica por apenas 25 euros con el fin de que voten a favor de la permanencia de Reino Unido en al UE en el referéndum que tendrá lugar el día 23 de junio. ¿Y cómo saben que estos pasajeros no votarán por el brexit? En el universo low cost todo es incertidumbre. Compras algo en IKEA y jamás tienes la certeza de que sepas montar muebles en sueco. Se conocen casos de gente que adquirió alacenas y armó cajoneras.

Hace poco estuve en Marsella y acabé en un pub departiendo con un inglés que llevaba años residiendo allí. Le pregunté por el brexit. Supuestamente, si vencía, le iba a dejar en un limbo legal. A pesar de ello, me dijo que iba a votar por la salida de la UE. "A los españoles os encanta la Unión Europea porque no tenéis ni idea de lo que significa", me espetó. Y pensé en eso del orgullo nacional, que es lo que muchos británicos —casi todos, ingleses— creen estar votando en este referéndum. Saben tan poco de la UE como nosotros, pero hacen más ruido al enfadarse. Nosotros nos enorgullecemos de ganar un mundial de fútbol. Los ingleses, de haber inventado el fútbol. Nosotros queremos quedarnos sin saber aún de qué va; ellos quieren irse sin tener muy claro adónde. Al final, esto de Europa es como el balompié: juegan todos contra todos y gana siempre Alemania.