América Gabriel, golpeada por exigir que se recojan las heces de un perro
América Gabriel fue agredida por un hombre cuando paseaba por un parque de moda de la Ciudad de México
En uno de los parques más chic de la capital mexicana, donde los perros mejor peinados gozan de establecimientos propios —como peluquerías, tiendas de ropa, de comida y buena parte de las zonas verdes— las heces de uno de ellos han estado a punto de provocar una tragedia. La actriz y presentadora de televisión mexicana, América Gabriel, paseaba con el suyo cuando observó que una pareja estaba dejando el regalito de su can en medio de los empedrados andadores del Parque México. "Le pedí que recogiera la popó. Me escupió y después me abrió la cara con el manubrio de la bicicleta", cuenta Gabriel desde el otro lado del teléfono. La aparente tranquilidad con aires neoyorquinos del barrio mexicano se ha roto.
"Por personas como ustedes México está como está. Por eso no avanzamos", dijo la presentadora a la pareja que había dejado en el suelo las heces de su perro. Y fue la frase que desató la bronca. No se sabe si se sintieron responsables de la situación del país a la que hacía referencia Gabriel, o se cansaron de sus exigencias, pero el hombre le soltó un escupitajo a la conductora y el plácido paseo de domingo derivó en una pelea callejera.
"Cuando me di cuenta de que me había escupido, volteé para buscar a mi perra y al girar la cara, él me agredió muy fuerte", recuerda. Supo entonces que si quería vengarse, la arma más eficaz que uno puede tener es su smartphone.
Mientras sangraba por una herida en su ceja, grabó su cara y la del hombre al que ha denunciado este lunes como su agresor, y los vídeos ya están en todas las redes sociales. Él, que aparece con una gorra negra en las imágenes, acaba de perder el anonimato. Ya lo han bautizado en el mundo viral como Lord Popó.
El Parque México ha sido también el escenario de otros eventos macabros relacionados con los perros. En octubre del año pasado al menos una decena de canes murieron envenenados con raticida escondido en algo que comieron en los jardines. Sus dueños se organizaron contra el misterioso o misteriosa mataperros. La delegación habló de "una crisis de envenenamiento de animales de compañía".
La preocupación de los asiduos al parque por los pequeños pugs, collies, y los clásicos french poodle es algo que une al barrio. Mucho más coflictivo parece el destino de sus heces.
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