Refugiados, lo sentimos

Lo sentimos, refugiados. Estamos demasiado ocupados con nuestros intereses electorales y no podemos dejar crecer a la derecha más xenófoba y recalcitrante. Muchos de vosotros habéis muerto en el camino; otros, con mucho esfuerzo y sufrimiento, habéis llegado al que creíais era el paraíso de los valores, de los principios éticos y del respeto por los derechos humanos. Lo sentimos, Europa de no es nada de esto. Preferimos pagar la factura a Turquía y contentar el egoísmo de Reino Unido. La vida, dicen, es un orden de prioridades y la nuestra no es salvar vidas humanas de personas en peligro. Lo sentimos.— Guillem Martínez Aparicio. Barcelona.

Viendo las imágenes, uno siente vergüenza de lo que está pasando con esas miles de personas y la decisión de Europa de abandonarlas comprando a Turquía para que las reciba sin ofrecerles las más mínimas garantías de techo, comida y respeto a los derechos humanos. Y nuestros políticos, ¿no dicen nada? ¿Cuándo saldremos a la calle a protestar, nadie toma la iniciativa? Esas filas de personas abandonadas recuerdan a las filas de judíos camino a los campos de concentración.— Rubén Fabregat Bracco. Madrid.