Arantxa: “Mis hermanos me han vetado en el tanatorio”

Arantxa Sánchez Vicario ha pasado apenas veinte minutos en el tanatorio barcelonés de Les Corts, donde ha acudido para dar el último adiós a su padre, fallecido este jueves. Pero las desavenencias familiares han impedido que la tenista pudiera despedirse de Emilio Sánchez: "Mis hermanos me han vetado. No quiero espectáculos", ha dicho Sánchez Vicario, a su salida del centro al que ha acudido acompañada de su esposo, José Santacana.

Al parecer, el hermano de Arantxa, el también tenista Javier Sánchez Vicario, ha intentado impedir la entrada de su cuñado en la sala donde se encontraba toda la familia. Se ha producido un forcejeo y la tenista ha intercedido para defender a su esposo.

Una situación de lo más desagradable que ha llevado a la madre de la tenista a sufrir un desmayo y tener que ser atendida por una ambulancia que se ha trasladado hasta el tanatorio. Arantxa solo ha podido dar un abrazo a su madre. 

Y es que, a pesar de que la excampeona de Roland Garros había firmado una tregua con su familia el pasado julio, su boda en 2008 con Pep Santacana hizo más complicadas las relaciones de Arantxa con sus padres, que intentaron impedir el enlace. "Actualmente no guardo ningún tipo de relación con nadie de mi familia y me encuentro en una situación en la que tengo que realizar el trabajo que otros deberían haber hecho ya antes, ya que esa era su responsabilidad", dijo la tenista al presentar su libro autobiográfico ¡Vamos! (La Esfera) en 2012,  donde desvelaba sus problemas familiares. 

Desde ese año hasta ahora la relación de Arantxa con su familia se ha producido a través de abogados. Solo al acercarse el momento final, la tenista acudió al hospital en el que ha fallecido su padre. Arantxa vive ahora en Miami con su marido y sus hijos.