Bajo la ducha, en un punto ciego para las cámaras de vigilancia, se encuentra la entrada del túnel de 1.500 metros por el que escapó el narcotraficante: un boquete rectangular, de unos 50 centímetros de lado y poco más de 10 centímetros de espesor, que se abre a una sima oscura a la que no se ve fin.Saúl RuizEl lugar, un cubículo hostil y de dimensiones mínimas, se sitúa en el núcleo duro del presidio. A un lado de la ducha ha quedado la tapa del tunel por el que escapó El Chapo: una losa de 20 kilos.Saúl RuizEn el pasillo 2 del penal hay 11 celdas. La última, que está sola es la de El Chapo. En la imagen, un ventanuco y un perchero de colores en la pared del habitáculo.Saúl RuizDesde el habitáculo, que no mide más de ocho metros cuadrados, parece imposible la fuga. En la imagen, la letrina de la celda.Saúl RuizLas grabaciones muestran a Guzmán nervioso, recorriendo de un lado a otro la celda. En la imagen, una de las cámaras y una ventana en el interior del cubículo.Saúl RuizPara llegar a la celda 20 hay que atravesar 26 filtros y controles. Es un universo denso y compartimentado. En blanco, negro y gris. No hay colores. Los pasillos acaban todos en barrotes, unidades estancas y puestos de vigilancia.Saúl RuizEl Penal del Altiplano es un laberinto de 27.900 metros cuadrados donde penan los mayores criminales de México.Saúl Ruiz
