Memorias: "Al final tanto de lo que creemos que somos está vinculado por los recuerdos que elegimos". En la foto: Cazalis con su padre en los años setenta.Carlos CazalisEl dolor: "En esos momentos uno se siente terriblemente solo y el mundo es tu enemigo". En la foto: su hermana menor abraza a su madre en el hospital Infanta Luisa, de Sevilla, donde aguardaban a que su padre saliera de la cirugía.Carlos CazalisLa vigilia: "Durante dos meses puse una vigilia de velas con el retrato de mi padre".Carlos CazalisLa vida sigue: "El hospital estaba en el corazón de uno de los barrios más antiguos y tradicionales de Sevilla, Triana... Afuera era Semana Santa y los devotos desfilaban".Carlos CazalisLa agonía: "Yo estaba fotografiando a mi padre mientras estaba entrando y saliendo de cuidados intensivos -por dos meses- porque era una forma de estar presente, enfocado y porque, seguramente, esta podría ser la última vez".Carlos CazalisLa espera: "Mi padre había empeorado".Carlos CazalisLa muerte: "Mi padre murió esa tarde. Rodeado por su familia".Carlos CazalisEl último beso: "Mi tía cristina y hermana menor de mi pare le dio un beso de despedida en el crematorio".Carlos CazalisLa cremación: "La imagen más difícil que tome. Los restos de mi padre entrando al horno durante la cremación".Carlos CazalisEl día después: "A la mañana siguiente, el amor se mantuvo".Carlos CazalisDía de muertos: "Seis meses después de su muerte y la urna con sus cenizas aún estaba en casa".Carlos CazalisUn año después: "Soltando. Visité a mi hermana en Nueva York un año después."Carlos CazalisEl último paso: "Era importante que mi hermano participara en la liberación de las cenizas... Para mí, la esencia de él estaba en otro lugar, a menudo en nuestra presencia".Carlos Cazalis