17 fotosAl-Kawtar: al otro lado del umbralLas discapacitadas son rechazadas por la conservadora sociedad marroquí. Una cooperativa empodera a estas mujeres Marrakech - 08 jun 2015 - 11:02CESTWhatsappFacebookTwitterBlueskyLinkedinCopiar enlaceEn la cooperativa hay mujeres con diferentes tipos de discapacidad. AL-Kawtar manofactura todo tipo de prendas de vestir y ropa para el hogar. Sus productos son totalmente artesanales y de altísima calidad. En la imagen, dos mujeres bordan un cojín y una colcha.Nuria López TorresTodas las mujeres almuerzan en la cooperativa, que paga a una cocinera para que haga la comida y se encargue de la limpieza de las instalaciones.Nuria López TorresBouchara es la secretaria de la cooperativa. Realiza tareas administrativas y trabajos de costura.Nuria López TorresNora es la administrativa de la cooperativa. Pequeña de tamaño, pero grande de espíritu y energía. Es una miembro de la asociación muy querida y respetada por todas.Nuria López TorresYamna, de 39 años, se rompió la cadera cuando tenía cuatro. Hasta su operación en 1995 tenía que arrastrarse por el suelo para poder desplazarse. Nunca asistío a la escuela ni recibió formación alguna. Vive sola, sin ayuda de ningún familiar.Nuria López TorresTamo nació con un problema en la columna vertebral que le ha obligado a quedarse en una silla de ruedas el resto de su vida. Tiene un gran sentido del humor y una hermosa sonrisa.Nuria López TorresLatifa tiene 27 años y nació sin pies. En enero de 2012 se casó con un hombre que conoció en la medina de Marrakech cuando iba a trabajar a la cooperativa. Ella es una heroína para sus compañeras porque ha conseguido casarse a pesar de su discapacidad.Nuria López TorresBouchara tuvo un accidente con cuatro años en el que se dañó la columna. Para caminar tiene que utilizar dos muletas. Estas prótesis, aunque bastante dolorosas, le permiten no tener que estar en una silla de ruedas.Nuria López TorresAmina, secretaria de la asociación Al-Kawtar y la impulsora de la cooperativa, posa en la puerta de la tienda que tienen a pie de calle en la medina de Marrakech. Amina tiene un gran sentido del humor y un trato muy agradable. Se le da muy bien trabajar cara al público.Nuria López TorresJmiâa, con su sobrina en una de las calles de la medina. Jmiâa colabora con la asociación y la cooperativa Al-Kawtar como voluntaria, ya que ella tiene formación universitaria y habla francés. La medina, que es el casco antiguo de Marrakech, no tiene ningún tipo de adaptación urbanística para las personas discapacitadas.Nuria López TorresLatifa y su marido Ablelali posan en su dormitorio. Latifa se siente muy afortunada porque nunca pensó que encontraría a un hombre que la quisiera tal y como es. La cooperativa es muy importante para ella porque le ha dado confianza en sí misma e independencia económica.Nuria López TorresAblelali piensa que se ha casado con la mujer más hermosa del mundo y para él no es un problema que Latifa no tenga pies. El caso de Ablelali y Latifa es una excepción. Generalmente, en la clase social humilde de Marruecos, la discapacidad física de una mujer, por pequeña que sea, es motivo de rechazo por parte de los hombres.Nuria López TorresYamna vive sola en un cuarto en la azotea de un viejo edificio de la medina de Marrakech. No tiene ascensor y subir las cinco plantas cada día es un suplicio para ella.Nuria López TorresYamna descansa en su habitación de 10 metros cuadrados, la misma en la que duerme y cocina. Zineb, que sirve el té, es su vecina de dormitorio y la cuida mucho. Zineb se va a casar en pocos meses y se la quiere llevar a vivir con ella. No quiere que se quede sola.Nuria López TorresFátima, en la azotea de casa de sus padres. A pesar de la dificultad para poder caminar y del dolor que le inflinge su pierna, ella realiza muchas de las tareas domésticas. No quiere que su discapacidad la limite en su vida cotidiana.Nuria López TorresLa pierna de Fátima se ha deteriorado mucho debido a que pasó muchos años sin llevar prótesis. Ha estado ahorrando durante tres años gracias a su trabajo en la cooperativa, y ahora acaba de comprarse una de las mejores prótesis. Está muy contenta con su pierna, pero también tiene miedo porque sabe que los primeros meses serán muy dolorosos hasta que se pueda acostumbrar.Nuria López Torres