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Migrados
Coordinado por Lola Hierro

Si no tienes derechos en tu propio país ¿para qué volver?

El compañero de Enrique Góngora le coloca la alianza el día de su boda en Barcelona. / Foto cedida por Enrique Góngora.

AUTORA INVITADA: JULISSA JÁUREGUI

Peruanos homosexuales que viven en España narran sus vivencias. Tras que el proyecto de ley de Unión Civil entre personas del mismo sexo en el Perú haya sido rechazado, esperan algún día su aprobación como garantía de sus derechos.

“Aquí me he enamorado por primera vez. En Perú no habría podido tener esta relación”, cuenta Eduardo Fuentes mientras bebe una cerveza en una terraza del barrio de Lavapiés. Llegó a Madrid hace 12 años tras la inesperada muerte de su madre en Lima.

A lo largo de la conversación recuerda el carácter machista y autoritario de su padre, a quien llamaba Sargento. Con el paso de los años ha reflexionado sobre cómo la formación y la estricta educación que recibió han marcado su personalidad y fueron factores que alimentaron su inseguridad.

"Creo que ello influyó también en mi ruptura sentimental. Me costaba por ejemplo ir de la mano de mi pareja", confiesa tras narrar el fin de su primera relación homosexual al llegar a Madrid.

Enrique Góngora, al igual que Eduardo, menciona la censura hacia cualquier otro modelo que no fuera la familia tradicional cristiana. Enrique es traductor, lleva 30 años en Barcelona. Llegó en los años ochenta cuando el Perú se desangraba por la violencia política y donde la libertad para las personas homosexuales era casi impensable. Su primer destino fue Nueva York en 1983. Esta ciudad cosmopolita, en un principio, le ofreció la libertad que buscaba, pero al aparecer el sida, las cosas cambiaron. Se extendió el miedo entre la población a los homosexuales y, como consecuencia, perdió su trabajo como cuidador en una guardería infantil.

A principios de 1984 llegó a Barcelona y pocos años más tarde la situación se repitió: el sida surge en España y vuelven a recaer los mismos prejuicios sobre la población LGTBI. Tras estas experiencias, decide formar parte de una organización de derechos de gais y lesbianas y lucha contra el virus. “Participé de esta organización para deshacer el mito y para luchar contra la discriminación”, declara orgulloso.

Con 53 años, acaba de casarse con su compañero de hace 11 para poder garantizar sus derechos y celebrar su felicidad con sus familiares y amigos. “A mis 22 años mi padre me dijo que nunca iba a ser feliz, hoy puedo decir que sí lo soy junto a mi pareja. Me considero realizado como ser humano y seguiré luchando por los derechos de las personas”.

El congresista Carlos Bruce, quien declaró su homosexualidad, presentó el 12 de septiembre de 2013 en el Congreso de la República unproyecto de ley de Unión Civil entre homosexuales.

El proyecto de ley está definido como: “La unión voluntaria conformada por dos personas del mismo sexo con el fin de establecer y garantizar derechos y deberes, el uno para con el otro”.

El matrimonio entre personas del mismo sexo en España fue aprobado en 2005 con el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Su aprobación no supuso una fractura de la sociedad.

En el Perú, como ocurrió en España aunque en menor medida, recurren a razonamientos como que la familia se destruirá o que incentivaría la homosexualidad. En el proyecto de ley presentado, uno de los argumentos en respuesta a la oposición de la unión civil es: “Tampoco existe la posibilidad futura que debido a las leyes como esta, a las personas se les permita casarse con un animal o una mascota, o con un niño”. Que un planteamiento como este sea defendido por parte de la sociedad, simplemente es denigrante no sólo para el colectivo LGTBI sino para quienes creemos que todas las personas tienen los mismos derechos.La Declaración Universal de Derechos Humanos proclama en su artículo primero que "todos los seres humanos nacen libres en dignidad y derechos".

En el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos de 1966, firmado y ratificado por Perú en 1978, declara en su artículo 2 que todos los Estados partes están obligados a respetar y garantizar los derechos sin distinción alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición social.

El Comité de Derechos Humanos de la ONU, en el quinto informe periódico del Perú de marzo de 2013, destacó la preocupación por la discriminación y violencia que sufren las personas por su orientación sexual e identidad de género: “El Estado parte debe declarar clara y oficialmente que no tolerará ninguna forma de estigmatización social de la homosexualidad, la bisexualidad o la transexualidad, ni la discriminación o la violencia contra personas por su orientación sexual o identidad de género”.

“Un pequeño gran paso”

Piero Bacigalupo, activista pro derechos humanos de 30 años, llegó a Madrid en 2006 por un intercambio de seis meses en la Universidad Carlos III y desde entonces vive en Madrid. “Vi mundo, vi cosas que no había visto en mi país, sigo deslumbrado”.

En traje, acaba de salir de la oficina. Caminando por la céntrica calle Gran Vía comenta cómo le impresionaron los valores y principios, la tolerancia y el respeto de la cultura europea. Él es uno de los muchos peruanos convencidos de que, aunque no viva en el Perú, tiene el derecho a opinar sobre lo que acontece allí.

“Que el Congreso rechace debatir esta Ley que les otorga derechos mínimos a las personas no heterosexuales es legalizar la discriminación. Pero, al contrario de lo que buscaban, el Perú está dando un pequeño gran paso hacia la igualdad ya que en 1 año de debate se ha pasado de más de 70% de rechazo a la ley a un 51% de aprobación, según la última encuesta de DATUM” analiza Piero.

El 10 de marzo el proyecto de unión civil fue rechazado en la votación (cuatro votos a favor, siete en contra y tres abstenciones) realizada en la Comisión de Justicia y Derechos Humanos del Congreso, a la que sólo asistieron 14 congresistas de 130 demostrando el desinterés sobre el tema.

Sin embargo, esta resolución no ha significado la retirada de esta demanda en la esfera pública por parte de los colectivos, organizaciones y personas homosexuales y heterosexuales. Así, este sábado 11 se llevará a cabo la segunda Marcha por la Igualdad en Lima para reclamar los derechos no reconocidos del colectivo LGTBI que aún siguen postergados y que no están dispuestos a negociar.

El Perú sigue siendo una sociedad machista y heteropatriarcal, que junto con el racismo, son una de las mayores lacras que sólo con voluntad política y ciudadana se puede combatir. Ante la idea rancia y exclusiva que algunos defienden sobre una familia heterosexual está la realidad de miles de personas. Muchos de ellos viven fuera del país, y esperan regresar algún día al Perú y ver un avance en cuanto a los derechos. “Si una persona se siente desprotegida por no tener un amparo legal; si no tienes derechos en tu propio país… ¿para qué volver?", cuestiona con firmeza Piero.

La campaña internacional de la Marca Perú de 2012 tenía por lema “Todo lo que necesitas hoy está en el Perú”, a 2015 todo lo que necesitamos en cuanto a derechos, evidentemente, no está en nuestro país.

Julissa Jáuregui es politóloga especializada en cooperación internacional y migraciones.

Comentarios

Ya ves, tanta precisión en la hora de esos chismes tan modernos y siglos de diferencia entre unos paises y otros. Si no nos sincronizamos en todo ¿como nos vamos a entender?
Las leyes se promulgan para encauzar legalmente la vida de la ciudadanía dentro de una jerarquía de valores, de derechos y deberes. Desde el respeto por las personas que nacen y existen tal cual son y se encuentran a si mismos.Sin que nadie les pida opinión antes de venir al mundo sobre sentimientos y tendencias.La homosexualidad es una realidad que afecta a un número considerable de personas nacidas mujeres y hombres en todas las razas.Lo normal es legislar sobre ese hecho, igual que se hace sobre cualquier otro ámbito social que nos afecte a la ciudadanía, porque es una realidad.Se han de desmontar mitos surrealistas amontonados por muchos siglos de ignorancia y fanatismos, que se han mal interpretado al socaire de los dichos y pensamientos de culturas ya superadas.Donde se prefería cerrar los ojos, y decir que la tierra era cuadrada y que era el centro del universo.Mal interpretando desde la ignorancia y la ceguera, justificada por otra parte, pues venimos de la época de las cavernas, donde aun la ignorancia era mayor.Sobre la realidad de nuestra naturaleza humana separada en dos polos, diferenciada en dos tendencias o dos sexos.Por dentro y por fuera.
lo que nos faltaba que se convierta España en Latinomarica
A estos latinos les están dando gato por liebre, no es lo mismo "unión civil" que "matrimonio"
Deplorable que todavía El País le de pelota al pegabanderas del presi de Costa Rica q sacó los colores del arco iris en vano…y se atreve a arrogarse una autoridad moral en derechos humanos. ¿se creará que los y las gay tienen derechos simplemente porque sus asesores son del lobby?Pues está muy mal aconsejado porque hay que predicar con el ejemplo…que el tico promete hasta que la mete…
Ya ves, tanta precisión en la hora de esos chismes tan modernos y siglos de diferencia entre unos paises y otros. Si no nos sincronizamos en todo ¿como nos vamos a entender?
Las leyes se promulgan para encauzar legalmente la vida de la ciudadanía dentro de una jerarquía de valores, de derechos y deberes. Desde el respeto por las personas que nacen y existen tal cual son y se encuentran a si mismos.Sin que nadie les pida opinión antes de venir al mundo sobre sentimientos y tendencias.La homosexualidad es una realidad que afecta a un número considerable de personas nacidas mujeres y hombres en todas las razas.Lo normal es legislar sobre ese hecho, igual que se hace sobre cualquier otro ámbito social que nos afecte a la ciudadanía, porque es una realidad.Se han de desmontar mitos surrealistas amontonados por muchos siglos de ignorancia y fanatismos, que se han mal interpretado al socaire de los dichos y pensamientos de culturas ya superadas.Donde se prefería cerrar los ojos, y decir que la tierra era cuadrada y que era el centro del universo.Mal interpretando desde la ignorancia y la ceguera, justificada por otra parte, pues venimos de la época de las cavernas, donde aun la ignorancia era mayor.Sobre la realidad de nuestra naturaleza humana separada en dos polos, diferenciada en dos tendencias o dos sexos.Por dentro y por fuera.
lo que nos faltaba que se convierta España en Latinomarica
A estos latinos les están dando gato por liebre, no es lo mismo "unión civil" que "matrimonio"
Deplorable que todavía El País le de pelota al pegabanderas del presi de Costa Rica q sacó los colores del arco iris en vano…y se atreve a arrogarse una autoridad moral en derechos humanos. ¿se creará que los y las gay tienen derechos simplemente porque sus asesores son del lobby?Pues está muy mal aconsejado porque hay que predicar con el ejemplo…que el tico promete hasta que la mete…

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