Intelectuales en la política
Parece que la política se ha abierto a recibir gente intelectual y de la cultura en general, algo que hacía mucha falta. Los últimos, Fernando Delgado y Ángeles Caso; bien recibidos para aumentar la lista que puede ennoblecer algo el actual formato, tan devaluado por unos políticos ramplones. Todo han sido insultos y el famoso “y tú más”, no ha habido aportaciones positivas ni realistas. Todo son filosofías sin datos, promesas que no cumplirán. Casi todos estos nuevos personajes se integran en partidos políticos de izquierda (el PP ya ha demostrado que detesta la cultura).
Quizá se pueda explicar el problema de la corrupción en la poca calidad de la gente que se integra en partidos con el único mérito de tener el carné de militante, y a partir de ahí pueden ascender hasta puestos inauditos para sus conocimientos. Los vemos a diario, son gente que se aprovecha durante unos años y se va a casa con los bolsillos llenos. Recibo con agrado a estos nuevos hombres, al menos cultos, que nos traerán unos textos no ceñidos a la agresividad hacia el contrario, cosa que aburre ya a casi toda la ciudadanía.— Cesar Moya Villasante.
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