Kris Knight, el pintor que inspiró a Gucci

Kris Knight ha comprobado de primera mano el poder del mundo de la moda y su capacidad para amplificar cualquier cosa que toca. Knight (Ontario, 1980) es un pintor que lleva exponiendo su obra desde 2005, principalmente en Estados Unidos y Canadá, en exhibiciones grupales. Hace aproximadamente un año y medio, la gran jefa de Gucci, Frida Giannini, afirmó en público que el trabajo de Knight le resultaba "tremendamente inspirador". Han pasado 18 meses y el canadiense se encuentra hoy en la Miami Art Basel, la feria de arte contemporáneo más importante del mundo, flanqueado por Giannini y la plana mayor de Gucci, tratando de asimilar lo que se le viene encima. “Cuando Frida alabó mi trabajo me sentí muy honrado y sorprendido. Es algo que no esperaba en absoluto y lo único que pude hacer fue darle las gracias. Estar hoy aquí en mi primera exposición en solitario me hace muy feliz”, contaba el lunes Knight, enfundado en un traje y con un notable punto de timidez mientras la galería donde se expone su trabajo se llenaba hasta los topes.

La obra del pintor combina una concienzuda gama de colores pastel, la languidez de los retratos realizados por artistas franceses del siglo XVIII (una influencia que reconoce el propio Knight) y un fuerte componente andrógino que explora la (a)sexualidad de sus sujetos: “Me gusta pensar que soy un narrador, más que un pintor, y que en realidad estoy tratando de componer mi propia mitología. ¿Cine? No, la verdad es que soy mucho más aficionado a la televisión, aunque es verdad que hay un matiz cinemático en lo que hago aunque no sea un referente cristalino sino la mezcla de muchos” analizaba Knight mientras su presencia era reclamada constantemente por los visitantes que admiraban la docena de cuadros expuestos en la galería Spinello projects, en el nuevo Design District de Miami.

“Vi la obra de Kris por primera vez hace unos 19 o 20 meses, recuerdo que me chocó muchísimo y pronto empecé a imprimir imágenes de sus cuadros y a colgarlas en mi despacho, recurriendo a ellas constantemente cuando me surgían dudas en mi trabajo. Así fue cómo se convirtió en mi mayor inspiración para la colección de 2014” confiesa Giannini, quien aterrizó en la presentación acompañada de otros miembros de la plana mayor de Gucci en una visita relámpago que duró la media hora que la gurú de la marca italiana dedicó a hacerse fotos con los presentes, a mimar a Knight y a charlar con algunos periodistas sobre la importancia del pintor canadiense en su trabajo.

“¿La mayor influencia? Yo diría que es su paleta de colores, sin ninguna duda. Me ayudó muchísimo a definir la colección y a ejecutarla en términos creativos” dice Giannini, que ante la pregunta de si ella también trata de crear su propia mitología (no hay que olvidar que la romana asumió el puesto de directora creativa en Gucci después de la marcha del legendario Tom Ford) sonríe y entorna los ojos: “No lo sé. Supongo que sí, que podría decirse así. Me gusta mirar al pasado y coger elementos que me ayuden a entender mejor el presente pero sí, puede ser que esa intención narrativa sea algo que Kris y yo tenemos en común”.

La italiana, de negro riguroso y de excelente humor, reconoció también que la relación de su trabajo con el arte se estrecha cada vez más, algo que no se toma a la ligera. “No soy partidaria de buscar referentes artísticos porque sí, que es algo que sucede cada vez más. Eso me parece algo forzado y además no tiene sentido. Lo que sí me gusta y lo que trato de hacer es desarrollar esas relaciones de forma natural a través de mi trabajo. En el caso de Kris fue algo natural: vi su trabajo, me pareció brillante y poco después le contacté porque quería saber más. El proceso fue sencillo y creo que por eso estamos hoy aquí” contó Giannini, que sabe que con su varita mágica (y la de industria a sus espaldas) ha dado un descomunal empujón a la carrera de Knight. “Ojalá, es un hombre de gran talento y espero que su trabajo inspire a otros como me ha inspirado a mí”, remató.