Simeone, nuevo líder

Después de que el Real Madrid empatara frente al Valladolid, la Liga vuelve a estar abierta. Atlético de Madrid y Barcelona dependen de sí mismos y los de Simeone tienen al alcance los dos trofeos más codiciados, la Champions y la Liga. Es cierto que el Real Madrid se juega mucho en Oporto, que no puede dejar escapar la décima y se lo pondrá muy difícil, y que el Barça después de la peor temporada desde que en 2008 Guardiola tomó el mando del equipo, con la victoria en la Liga salvaría los muebles para hacer una renovación ordenada. Pero pase lo que pase en los próximos 15 días, gane o pierda cualquiera de los dos títulos o los dos, la temporada 2013-2014 será la de Diego Pablo Simeone, el nombre que se recordará será el suyo, no el de quien consiga el balón de oro o el Trofeo Zamora.

Con un presupuesto de menos de un tercio del de los dos grandes (146 millones de euros frente a 507 y 457), Simeone ha sabido persuadir, cohesionar a su equipo y motivarlo, adaptarse a la situación en cada partido, y eso porque tiene la autoconfianza y el equilibrio emocional de los líderes. Ese liderazgo no sólo lo ha conseguido en el banquillo, sino con los aficionados colchoneros, y en general con los amantes del fútbol, que estábamos un poco hartos de tanto bipartidismo y aunque defendamos otros colores sentimos una cierta envidia sana.— Diego Villar Sánchez.