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Me visto y comunico

“Te reciben según te presentas. Te despiden según te comportas”. Quevedo.

Ese “despedir”, en el caso de las mujeres en política, podría significar aquellos comentarios negativos que nacen después de ver el atuendo de algunas dirigentes. Este estudio demuestra que la mujer en política se enfrenta más que a un mensaje en un discurso o un acto. Los criterios de valoración de las mujeres siempre serán más que los del hombre por el mero hecho de su vestimenta. La variedad de ropa es innegable frente a la del hombre. Y eso siempre conduce a una segunda lectura para los medios de comunicación. Sin embargo, el vestir puede resultar a veces la primera lectura en la mente de un ciudadano.

Toda persona comunica, su ropa comunica, sus formas comunican, su mensaje comunica. Pero si el vestir destaca frente a los mensajes y frente a su discurso, el titular estará garantizado. Eso es algo que ha pasado con Angela Merkel o con Kirchener. Pero que también puede pasar con el botón del traje de un hombre en un Sesión de Control. Sin embargo, ciertamente la mujer está más expuesta por la variedad: siempre habrá quién se fije en una falda (corta o larga), en una blusa (transparente o no), o en un escote (demasiado arriesgado, o no). Según el experto en protocolo José Antonio de Urbina, nuestra imagen ante los demás consta de tres elementos básicos: lo que ven de nosotros los demás, lo que oyen los demás, y lo que sienten y piensan los demás al vernos y al oírnos.

Cuando vimos a Kirchner con sus leggings, a Merkel con su escote, a Michelle Obama en deportivas, o cuando vemos a Soraya Sáenz de Santamaría en las ruedas de prensa tras el Consejo de Ministros con tal variedad de peinados, ¿qué pensamos? ¿qué sentimos? Una vez más, se trata de percepciones. El vestir bien tan sólo significa adecuarse al lugar donde uno vaya a interactuar, conocer el objetivo de “estar”, conocer y tener claro el mensaje que se quiere transmitir, a quiénes hay que dirigirse y cómo hay que hacerlo. Nada más. El equipo de estas políticas entienden el concepto, lo conocen y lo miden. Han sido noticia y, probablemente, hayan conseguido su objetivo.

Cuando ellas se visten, comunican. Como las mujeres de negro. Mujeres y políticas que visten de negro. Pero… ¿qué significa el negro? En política, el negro está asociado a la elegancia, pero también este color transmite negatividad, pena, tristeza o luto. Cuando una política española viste de negro puede transmitir elegancia, pero si el contexto es de crisis y desafección posiblemente lo que proyecte sea un mensaje en negativo. De negro ha vestido Santamaría, Ana Botella, Carme Chacón y Trinidad Jiménez. Destacar que Chacón y Jiménez vistieron de negro cuando cedieron sus carteras a los nuevos ministros. ¿Coincidencia? Simbólicamente estaban de luto, dejaban sus cargos después de que el PSOE sufriera una derrota electoral inevitable.

Sin embargo, el color negro también significa protección, de ahí que posiblemente sea utilizado por los políticos del PP desde que ostentaron el cargo para dar esa nueva imagen paternal a la que aludía George Lakoff en su libro Don’t think of an Elephant. Y el negro también es silencio y orden, dos palabras propias del marco conceptual del Ejecutivo español. O a Merkel. Aunque a Merkel en su campaña electoral pocas veces haya sido vista “de negro”.

*Imagen del artículo"¡Tápese, presidenta!" La moda, esa arma arrojadiza en la política. Por Getty

Comentarios

http://nelygarcia.wordpress.com Todo es subjetivo y cada profesión tiene sus reglas. La mujer debe de ser ella misma en todo momento, “sin intentar parecerse al género opuesto”, pero escogiendo el vestuario que mejor la represente en cada circunstancia.
hay que fijarse en los hechos y comportamientos de las personas, y no en el envoltorio, es una frivolidad que sirve para divagaciones que no van a ninguna parte, cuando conoces a una persona , ni te fijas lo que lleva puesto.
"...cuando vemos a Soraya Sáenz de Santamaría en las ruedas de prensa tras el Consejo de Ministros con tal variedad de peinados, ¿qué pensamos? ¿qué sentimos?" Francamente, nada.
La vestimenta y la estética en las mujeres está muy sobredimensionada porque vivimos en sociedades que aún son absolutamente machistas y patriarcales, se diga lo que se diga.Se parte de una especie de dogma que casi nadie discute, feministas incluidas, y es que las mujeres tienen que cuidar mucho más su apariencia que los hombres.Pues bien, eso es absolutamente rechazable desde un punto de vista simplemente progresista, y ya no digamos desde el feminismo. Sin embargo no se hace. Observar, por ejemplo, los maquillajes de Cristina Fernández ("de Kircher", que esta es otra) resulta deprimente por motivos ideológicos, pero es que, además, desde el punto de vista físico hace fea a quien podría ser muy atractiva.Bueno, a ver si tengo suerte y no me borran el mensaje, que es algo a la que son muy aficionados aquí.
Sobre el uso del negro: de jovencita estuve varios años vistiendo radicalmente de negro en parte por moda y en parte porque es el color más sufrido y que combina con todo. También el más barato, llega siempre a las rebajas. El negro fue también utilizado por los existencialistas. Me extraña que no se apunte aquí que eventualmente es el color elegido por los disidentes y expresa desaprobación con el orden establecido.Sobre lo que significa la ropa en política habría que preguntar a los asesores de imagen. Es posible que Angela Merkel enseñe el escote porque varias veces se ha aludido a su falta de coquetería (su pelo, la ausencia de pendientes); sus buenos asesores ante las críticas por su aspecto de marimacho le debieron aconsejar este gesto. otras políticas han posado según cánones femeninos por consejo de los asesores. ¿Fué Soraya la que protagonizó un reportaje semidesnuda, según ella porque le apetecía. La verdad es que se pone en tela de juicio la feminidad de una mujer cuando es inteligente y da golpes que dejan patidifusos a los hombrecitos. entonces empiezan una serie de descalificaciones por detrás que terminan en un posado que sirve para demostrar que es tan mujer como las demás y si no va de tía buena es porque no quiere.Hay mucho más materail sobre la pinta de los políticos, que no es con frecuencia casual. Los posados de presidentes hacieno footing o deporte llevan una intencionalidad que conocen los asesores. Vamos que es lo mismo que cuando besan bebés.La forma de presentación es la primera identidad que nos da una persona, el envoltorio. Pero todas las poses que se han reflejado aquí obedecen a estudios de expertos y hacen mal los ciudadanos en no entender que es la primera manipulación a la que nos someten.Cada vez que los medios de comunicación se refieren a un rasgo referido a la indumentaria colaboran con la manipulación de pretender que el envoltorio es idéntico al contenido (primera manipulación, seguirán otras). O que alguien no está a la altura porque no tienen la pinta adecuada.
"La vestimenta y la estética en las mujeres está muy sobredimensionada porque vivimos en sociedades que aún son absolutamente machistas y patriarcales". Claro, los hombres le ponen una pistola a las mujeres para que vayan de compras y para que entre el 60 y el 80% de las superficies comerciales estén dedicadas a la moda y complementos femeninos... Para que siendo un sector de la sociedad que se queja de sus bajos ingresos, es al mismo tiempo y de forma incomprensible, quien más consume de lejos en ropa, complementos, joyas, cosméticos, cremas, etc. ¿Las mujeres tienen que cuidar más su apariencia que los hombres? No. Las mujeres CUIDAN su apariencia mucho más que los hombres. Punto. Y las que más se fijan, desde luego, en la apariencia de los demás.
El aspecto físico es sumamente importante para comunicar y por supuesto, los personajes públicos deben de cuidar este aspecto con especial mimo. Siempre insisto a mis alumnas en la importancia de la imagen y la estrecha relación que guarda con otras disciplinas. Enhorabuena por el artículo! Un saludo
¿Las mujeres tienen que cuidar más su apariencia que los hombres? No. Las mujeres CUIDAN su apariencia mucho más que los hombres. Punto. Y las que más se fijan, desde luego, en la apariencia de los demás.Publicado por: balanza | 16/10/2013 10:17:30 Absolutamente en desacuerdo. Es producto de la educación y de lo que está bien o mal visto por la sociedad. No existe nada mágico dentro de las mujeres o de los hombres para determinados comportamientos, que no son más que roles sociales impuestos.Y que nadie me diga que es "instinto natural" porque los instintos están para resolver problemas, están para cosas necesarias y eso es absolutamente innecesario, una cuestión social, cultural o como se le quiera llamar.De hecho, si nos paramos a pensar, los maquillajes son una cosa enormemente desagradable que hasta da grima en determinados casos. Le das un beso a una que va así, o te lo da ella a ti, y te manchas la cara. Son pura manipulación, una comedura de coco que forma parte de la ideología dominante, con fines de, por una parte, embobar a la gente y por otra, hacer negocio con la explotación del mito de que eso es lo "femenino" y por tanto lo adecuado para las mujeres.
@Eu yo: Creo que se equivoca usted. Es producto de querer gustar a los demás y de depender de la opinión de los demás para valorarse a uno mismo. Es producto de querer atraer al otro sexo. Es producto de tratar de convertirse en aquello que los demás admiran o desean. Por eso he dicho mil veces que el macho alfa es construcción de la mujer del mismo modo que la mujer que se adorna, se maquilla, se modela, se depila, se pone tacones y escotes, es construcción del hombre. Es la atracción entre sexos la que está en el origen. Puro instinto, no construcción social.
Balanza:La atracción mutua no tiene porqué exigir a un sexo cuidar su imagen, su apariencia física, más que al otro. Eso es social, puramente social.Por otro lado, y de manera secundaria, eso de pintarrajearse siempre me ha parecido desagradable y repelente, más antierótico imposible, pero es la fuerza del rebaño, es la costumbre y lo que está socialmente bien visto, mientras que hacer lo contrario está mal visto: hombres por un lado (en la "moda") y mujeres por otro.
@Eu yo: Cuidar la imagen y la apariencia física resulta importante cuando es lo que más atrae al otro sexo. Si es que te importa atraer al otro sexo, claro… Los mecanismos de atracción se basan en ofrecer al otro lo que desea para obtener lo que tú deseas. Que el hombre se sienta atraído por la belleza femenina y por la juventud no es algo social. La belleza y la juventud son sinónimos de salud, de fecundidad. Nuestros genes egoístas buscan los mejores vehículos a través de los cuales perpetuarse. Todos los mecanismos de “camuflaje” femeninos están orientados a aparentar belleza y juventud, empezando por el maquillaje. Del mismo modo, los genes egoístas de la mujer no tienen empacho en aceptar que la fecundidad supone un obstáculo para su libertad y, de forma totalmente pragmática, saben que lo que más les conviene es procurarse un protector / suministrador. Resumiendo: A hombres y mujeres (a nuestros respectivos genes) les atraen cosas distintas en pro de la perpetuación de la especie. Me temo igualmente que los genes femeninos saben mejor que las propias mujeres que la llamada “independencia femenina” es algo coyuntural que sólo es sostenible en economías excedentarias. Y que las economías excedentarias van a ser cada vez más escasas. Es decir: Los genes femeninos prevén que a las mujeres les va a seguir conviniendo un macho protector / proveedor. Por eso veo bastante improbable que las mujeres den la misma importancia a la imagen masculina que los varones a la femenina. ¿Y esa obsesión de las mujeres por la apariencia de las otras mujeres? Sencillo: Tal como lo veo, modelos a seguir y evaluación de la competencia. No muy diferente de las obsesiones de los hombres con medirse o con fijarse en sus compañeros de sexo.
¿Pero qué pasa, que no se están publicando mis respuestas a Balanza?
No se está publicando la última, y la puse dos veces. En fin, no voy a decir más porque es perder el tiempo.
Eu Yo, mire usted que me extraña que le censuren comentarios, cuando la mayoría de ellos podrían ser suscritos por los autores de estos artículos.Las mujeres en todo el mundo cuidan más su imagen y su salud. Cuidar la salud es tanto como cuidar la imagen. Si pierden salud, pierden belleza. Y se cuida la imagen para aparentar salud, fertilidad, juventud y fuerza. Dígale usted a esa chica muy bajita que no se ponga tacones para salir los sábados por la noche a ligar, y luego me cuenta cómo le ha ido. Dígale usted a esa chica que con el maquillaje disimula el acné juvenil que no se maquille. Luego, por favor, descríbame la mirada que le echó.¿Somos los hombres quienes alentamos que las mujeres se arreglen como lo hacen? Depende de qué entendamos por alentar. Mire, cuando mi mujer sale de compras con alguna hermana o amiga (me refiero a compras de ropas, calzado, etc.), yo me hecho a temblar, porque le mete un meneo a la cartera que ni le cuento, oiga. Abre el armario, repleto de vestidos y zapatos y exclama con desolación: "¡No tengo nada que ponerme"! Y yo, temeroso de que se haya quedado miope perdida de golpe, le digo "¿pero cómo que no tienes nada? ¿Es que no ves todos esos vestidos ahí colgados casi sin estrenar?" Nada, mire usted, ella no los ve. Sale de compras y carga con varios vestidos. Y viene más contenta que unas pascuas. Luego, con su hermana, se tira como un par de horas probándose delante del espejo los trapitos que se ha comprado, entre risas y juvenil alborozo.Vaya usted a las tiendas esas de ropa que frecuentan las mujeres y explíqueles que están alienadas, que dejen de comprar ropas, zapatos, cremas y potingues. Y desde luego que las mujeres se arreglan tanto porque a los hombres nos gusta mirar a mujeres bien arregladas, escotadas o minifaldíticas. Obviamente. Igual que ellas miran más a tíos cachas, altos, guapos o con un cochazo impresionante. Pero ni ellas me obligan a mí a ir al gimnasio o a hacerme millonario ni yo las obligo a ir de punta en blanco. Ellas se fijarán más en el cachas de gimnasio y en el rico que en el esmirriado o pobre y nosotros nos fijaremos más en las mujeres de buen ver. Pero esto es una consecuencia natural que se desprende de nuestra condición sexual, no una presión social.Pero dígame usted, por favor, y dígalo con sinceridad. ¿A usted le gusta más ver a mujeres de setenta años en biquini o a chicas de veinte? ¿Cree usted que a la inmensa mayoría de los hombres nos gusta más las chicas de veinte que las de setenta por la educación recibida?
Perdón por la errata. En el anterior comentario, donde pone "hecho a temblar", debe poner "echo a temblar".
Considero que eso de los maquillajes y las mujeres embadurnadas de pintura es desagradable y de muy mal gusto. Maquillarse en el sentido de pintarrajearse es mancharse.Y ahora que me borren esto si quieren, igual que me han borrado el comentario anterior, que no consistía en esto que digo ahora.Eu Yo

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