Retiro el cartel, no por machista sino por plagio
La publicidad sexista forma parte ya del imaginario popular. No es la primera vez y seguramente tampoco la última que este tipo de anuncios se presentan para vender determinados productos. Un restaurante de Castellón intentó organizar en el mes de marzo una sesión de body sushi, una práctica gastronómica que consiste en comer sushi sobre el cuerpo de una mujer desnuda, sin más intención que el de hacer una sesión temática para el local, según sus promotores. La campaña tampoco llegó a concretarse y, como en el caso anterior, los organizadores del evento no veían ningún tipo de discriminación o degradación a la mujer. “No tiene sentido que se cree una polémica en torno a este hecho ya que es una práctica en la que no se degrada el cuerpo de una mujer”, ha dicho Carlos Sales, promotor del evento.
El sexo en publicidad vende. Eso es un hecho más que conocido, y sobretodo si se trata del cuerpo de una mujer. Pero también es cierto que el consumo popular suele alimentarse del sexismo que existe ya en la sociedad. Y de ahí que se utilicen los estereotipos para poner en venta un producto.
Los ejemplos se suman y multiplican. El año pasado, Ryanair lanzaba su “Calendario de azafatas 2012”, que tenía fines benéficos supuestamente. Las tripulantes de cabina aparecían posando en ropa interior y de manera muy sensual frente al avión de la compañía. Según el responsable de tripulación de la compañía, Eddie Wilson, “el personal de vuelo de Ryanair levanta la temperatura de la cabina con el calendario más caliente". Así de sencillo. Pero la compañía también ha utilizado esta estrategia de mostrar chicas en ropa interior dentro de otras campañas publicitarias, como Tarifas Calientes, que se ideó para vender billetes de bajo coste. La primera vez que Ryanair publicó un almanaque con azafatas sexis fue en 2008.
En el caso de Ryanair la aerolínea tuvo varias denuncias. La asociación de amas de casa Tyrius demandó a la aerolínea ante el Observatorio de Publicidad No Sexista de la Comunidad Valenciana. Las mujeres alegaban que la compañía “atentaba contra la dignidad de las mujeres trabajadoras en general y de las tripulantes de cabina en particular".
Otro caso ha sido el de la famosa campaña que se creó para promocionar la marca España Spain Marks. En él se ilustraba con la fotografía de una mujer de espaldas, desnuda de cintura para arriba y mostrando la marca del tanga. El Instituto del Turismo de España retiró también el anuncio, esta vez por tener connotaciones machistas. Eso si, después de numerosas denuncias.
En todos estos casos la mujer aparece como un elemento pasivo: acostada sobre la mesa, callada. O también fragmentada, mostrando solo una parte de su cuerpo como los pechos o las nalgas. El problema radica no solo en que siguen llevándose a cabo estas campañas publicitarias, sino en el cierto cinismo de algunos en negar que se utiliza el estereotipo de la imagen femenina para promocionarse.
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