"Hablábamos de la injusticia en la mesa, en el coche..."

“Solo trato de llamar la atención; es el único modo de conseguir que pasen cosas”. Estas palabras son de George Clooney. El actor y director las pronunció el viernes pasado, un momento antes de que fuera esposado e introducido en un furgón policial cuando protestaba ante la Embajada de Sudán en Washington por los horrores cometidos por el régimen del presidente Omar al-Bashir.

La estrella de Hollywood, que ha hecho de la denuncia del genocidio y el sufrimiento de los habitantes de Darfur su batalla personal, no estaba solo. Junto a él, una persona muy importante en su vida y quien le involucró desde pequeño en la defensa de los más débiles, su padre.

Nick Clooney, periodista, expresentador de televisión y profesor en la American University, en una entrevista para la revista Salon, ha explicado cómo se despertó en sus hijos, George y Ada, la conciencia social y cómo con el paso de los años el actor se ha convertido en uno de los grandes defensores de las causas justas. “Soy un creyente de la información y yo los inculqué la importancia de saber”, señala el periodista que asegura que, en la actualidad, los padres sobreprotegen en exceso a sus hijos. 

Él, sin embargo, nunca les mantuvo ajenos a los desastres de los que están llenos  los libros de cuentos y la vida real. “Siempre hablábamos de lo que estaba pasando en el mundo. Hablábamos de ello en la mesa del desayuno, en el coche... Quería saber como se sentía mi familia acerca de las cosas y especialmente acerca de las injusticias, aunque siempre tratamos de no perder el humor”, cuenta y añade: “La idea es lanzar 58 mensajes con la esperanza de que uno o dos calen y es entonces cuando nuestros hijos nos sorprenden haciendo bandera de alguno de ellos”.

 Aquella costumbre juvenil se ha mantenido a lo largo de los años. “Ahora, al levantar el teléfono hablamos de nuestras cosas, pero también de todo lo que sucede en el mundo”, dice Nick que asegura que sus dos hijos son personas extraordinarias y dentro “de ellos hay un montón de cosas buenas”. Gráficamente, en la entrevista apunta que si su hijo fuera un asesino en serie "jamás habría viajado con él en la parte de atrás del furgón policial".

Nick Clooney también apunta que ante los acontecimientos perturbadores del mundo él siempre optó por no mirar hacia otro lado. "Siempre creí en la participación. Pensaba y pienso que si alguien está en el suelo no debe permanecer allí de pie con los brazos cruzados sin hacer nada.. Eso siempre me ha importado, y le importaba a mi abuela y mi abuelo que me criaron". Y piensa que ese legado se lo ha trasmitido a su familia y ellos han recogido el guante.

Que el protagonista de Los descendientes y Los idus de marzo está también muy orgulloso de su progenitor quedó patente poco antes de ser detenido. "Estoy muy contento de estar aquí con mi padre", les confió a los periodistas. Dos días después y una vez liberado, contó en Fox News  que crecíó en una familia que cree hay que involucrarse con el prójimo. "Tenemos la responsabilidad de participar en la condición humana”, añadió.  El compromiso de la familia Clooney con el genocidio sudanés viene de lejos. En 2007, los dos presentaron el documental Sand and Sorrow sobre Darfur.