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Una selección de las mejores víctimas

Cae una banda que buscaba mujeres en Rumanía para obligarlas a prostituirse en Málaga

El clan de Los Lalai elegía muy bien a sus víctimas. Antes de ofrecerles un falso trabajo de bailarinas o camareras, estudiaba bien el perfil de cada mujer: su formación, su carácter, si tenían cargas familiares y si vivían en un entorno de pobreza. Se trataba de escoger a las más dóciles, para llevarlas desde Rumanía a España, y una vez en la Costa del Sol, explotarlas sexualmente con el mínimo de incidentes posible.

El Cuerpo Nacional de Policía ha desarticulado en Málaga un grupo criminal que captaba y obligaba a prostituirse a mujeres rumanas en el polígono del Guadalhorce de Málaga. Los agentes han arrestado a 12 personas pertenecientes a esta organización, cuyos miembros provienen en su mayoría de la ciudad costera de Mangalia (Rumanía). El juzgado número 13 de Málaga ha enviado a nueve de ellos a prisión preventiva.

Las investigaciones han permitido liberar a seis de sus víctimas. La organización ejercía un férreo control sobre ellas, maltratándolas y sometiéndolas a agresiones sexuales.

Las pesquisas han durado casi un año. Los agentes supieron que esta organización se había asentado en el polígono de Málaga, pero adotaban fuertes medidas de seguridad y tenían amenazadas a sus víctimas, algo que dificultaba enormememente conocer su funcionamiento.

El clan se encargaba de captar a las mujeres en Rumanía ofreciéndoles falsas ofertas de trabajo. Otros miembros las trasladaban hasta Málaga, donde las forzaban a prostituirse. Según los investigadores, les marcaban las tarifas que tenían que cobrar a los clientes, las zonas en las que tenían que ejercer y los domicilios en los que vivir.

En la operación, bautizada Pinsapo, se han registrado cinco domicilios en Benalmádena y Torremolinos y han intervenido dinero y numerosa documentación que acredita sus actividades delictivas.

Diez de los arrestados son de origen rumano. Los otros dos son de nacionalidad española y colombiana. Los investigadores les imputan delitos de asociación criminal para la trata de seres humanos, amenazas, delitos de lesiones y agresión sexual.

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