El estilo del duque de Windsor

"Fue el personaje más fotografiado de su época. Un icono de moda, innovador y a la vez excéntrico". A Luis Sans, el patrón de la tienda de moda barcelonesa Santa Eulalia, se le llena la boca al hablar del duque de Windsor (Londres, 1894- París, 1972). Sans, admirador del ex rey inglés, ha llevado a la sede de su tienda, en el céntrico Paseo de Gràcia algunos de los trajes que vistió el duque para exponerlos en el establecimiento hasta el próximo 17 de noviembre.

La tela de cuadros príncipe de Gales bendice la entrada. En el interior, trajes especiales como el que lució el día de su boda, el 3 de junio de 1937, con la estadounidense dos veces divorciada Wallis Simpson, dos fracs de color azul, un traje de golf o un original kilt escocés, que solía combinar de mil y una manera. "El duque de Windsor contribuyó de forma decisiva a que el resto del mundo sufriera una acusada fiebre de anglomanía", explica Sans.

Su encanto, previo a su relación con Simpson -la mujer por cuyo amor renunció al trono de Inglaterra-, se extendió rápidamente más allá de las fronteras. Siempre vestía con trajes del mismo sastre, aunque tras la II Guerra Mundial optó por hacerse confeccionar los pantalones en Nueva York. Fue el primero en lucir asiduamente el cuadro de Gales. Y también en optar por cuellos de camisa más amables y menos rígidos. Se atrevió a llevar pantalón con vuelta y traje con zapatos de ante marrón.

El duque de Windsor fue, según Sans, alguien capaz de cambiar la forma de vestir de su generación y de las siguientes. Los trajes que se pueden se presentan en Barcelona proceden de Ciro Paone, el fundador de la empresa Kiton, que los adquirió en una subasta en Sotheby's de Nueva York. La firma italiana los ha exhibido ya en algunas de las tiendas Kiton.