CiU tropieza con la propuesta de insumisión fiscal de Òmnium
Pujol y Homs discrepan sobre el "cierre de cajas"
No es lo mismo estar en el Gobierno que en la oposición, y menos en un partido como Convergència i Unió (CiU) , acostumbrado a los equilibrios soberanistas. La formación tropezó ayer al responder a Muriel Casals, presidenta de Òmnium Cultural, que el lunes esbozó una hoja de ruta similar a la de CiU, pero con mayores pretensiones: concierto económico, insumisión fiscal si se fracasa y, como último punto, un referéndum soberanista.
Los nacionalistas optaron por la prudencia desde el Gobierno, aunque el partido discrepó. El secretario general adjunto de CDC, Oriol Pujol, no tuvo dudas y aceptó los dos primeros pasos propuestos por Casals: pacto fiscal y, si falla, "cierre de cajas" (nombre que recibió la insumisión fiscal promovida por comerciantes catalanes a finales del siglo XIX). En una entrevista en Catalunya Ràdio, se le preguntó sobre la necesidad de optar por la insumisión fiscal en caso de que fracasara el concierto. "Muy probablemente, si pasara esto, le diría que sí", respondió Pujol. El dirigente nacionalista ya amenazó hace un año con un cierre de cajas, lo que le valió la reprimenda de su padre, el expresidente Jordi Pujol.
La puerta abierta de Oriol Pujol contrastó con la negativa a la insumisión fiscal del Gobierno. El portavoz, Francesc Homs, consideró la propuesta una "aportación interesante", aunque rechazó promoverla desde el Ejecutivo. "El Gobierno tiene un plan" para el pacto fiscal, aseguró.
El Partit dels Socialistes (PSC) y el Partido Popular (PP) soslayaron las contradicciones de CiU. El presidente del grupo parlamentario socialista, Joaquim Nadal, valoró por "prudente" la respuesta del Ejecutivo. El PP pasó de puntillas por la respuesta de Pujol y se centró en criticar a Òmnium.
Ambos partidos están en negociaciones con el Gobierno: los socialistas buscan un pacto para suavizar la ley ómnibus, troceada en tres partes. Los conservadores permitirán que se aprueben los presupuestos y la ley que acompaña las cuentas. Ayer, en la ponencia que evaluó esta ley, CiU y el PP se pusieron de acuerdo para aprobar sus enmiendas, excepto una: los nacionalistas no lograron que prosperara la subida del canon del agua que proponían. El PP quiere que se exima de la subida a las famílias con más dificultades. CiU está abierta a negociar y tendrá de tiempo hasta el pleno de la semana que viene para obtener el voto.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.