Dos horas y media sepultado bajo el hielo
El gélido número de un especialista inicia el festival Madrid Mágico 2011, que se celebra por primera vez a Madrid durante dos semanas
La señora se asoma a la piscina de bloques de hielo y amenaza alto y claro: "Espero que sea un truco porque, si no, te denuncio a Sanidad". Bajo su cabeza, al mago le castañetean los dientes. Víctor Cerro, ilusionista de 33 años, se ha convertido en la atracción del día en el vestíbulo de la estación de Metro de Nuevos Ministerios de Madrid.
Dos trabajadores de la organización del festival Madrid Mágico 2011 le rodean con una especie de ataúd de hielo hecho a piezas que rellenan con más hielo picado. Es un espectáculo de criogenización. El hombre tiembla y los viajeros que quieren suben al estrado para ver cómo su cara se va poniendo cada vez más blanca. Parece un pescado colocado en el mostrador de una tienda.
"Hoy Víctor Cerro está intentando luchar contra la hipotermia", radia el presentador, que cada pocos minutos advierte de que el mago se enfrenta a la muerte por frío en un vestíbulo en el que el resto de los paisanos sudan sin poder evitarlo.
-¿Qué tal estás?
-Frío -acierta a decir.
-¿Por qué haces esto?
-Porque se puede- responde con un hilo de voz.
El hombre, que lleva tres años practicando con esto de la magia fría, se ha propuesto sobrepasar el récord mundial que, según la organización del festival, está en dos horas 34 minutos. Lo consigue. Después de que muchos visitantes suban a verlo (ahora ya está cubierto totalmente de hielo de cuello para abajo), supera la marca por tres minutos y 24 segundos. Al abandonar el ataúd congelado, se lo llevan a una sala de reanimación, casi no puede andar. No puede atender a la prensa hasta que vuelva a recuperar la voz.
El entierro en hielo es uno de los primeros espectáculos de Madrid Mágico 2011, un festival que durará hasta el próximo 3 de julio con espectáculos gratuitos (en la estación de metro de Chamartín y en un autobús de la EMT en el que viajarán prestidigitadores) y otros cuyas entradas oscilan entre los 15 y los 30 euros en los teatros Alcázar y el de Bellas Artes y en el Matadero. La programación, que incluye actividades hasta el próximo 3 de julio, se puede consultar en la web oficial del festival.
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