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Tres años de frenesí

Cecilia Jan

David cumplió ayer tres años. Y dos días antes, Natalia hizo año y medio. Nada de tiempo, toda una vida.

Cuando miro atrás no consigo recordar apenas cosas que hacía antes y que ahora echo de menos. Tengo mucho más presente todo lo nuevo que ha invadido mi vida: desde detalles como la prueba del talón, Dora la exploradora, el Dalsy o los disfraces para el cole que perpetro con mi torpeza; a la reflexión que conlleva todo un proyecto vital: criar a dos niños felices y sanos que se conviertan en adultos felices y sanos desde todos los puntos de vista.

Lo que más noto, quizá, es cómo la vida se ha acelerado, cómo aunque paso muchas horas con mi pareja, no encontramos un momento para hablar tranquilamente porque siempre está uno de los dos –o los dos- corriendo detrás de algún niño para impedir una muerte horrible o solventando alguna crisis mundial. Cómo pese a tener una jornada infinitamente mejor, no tengo tiempo para pararme 10 minutos a leer el periódico, y ya ni digo una novela. Pero estos años pasan tan rápido –ya están pasando- que quiero vivirlos así de intensamente.

¿En qué habéis cambiado con la paternidad? ¿Cómo ha cambiado vuestra vida?

Comentarios

Supongo que no todos lo vemos igual. Mi madre me dijo una vez que era por egoismo. Pero desde luego yo no logro ver todo eso como algo maravilloso. A mí me gusta mi vida tal y como es, y tengo que hacer muchas cosas antes de que sea tarde. ¿Que los hijos hacen que todo eso ya no importe? No sé, pero llevo muchos años para terminar una serie de temas, y si llegan los hijos, se quedarían sin hacer. ¿Los hijos van a completar ese vacío que quedaría? ¡¡¡La vida es así!!! Un saludo.
Antes tenía una buena vida. Ahora tengo a Luz (5 recién cumplidos), Clara (3 y medio) y Hugo (9 meses) y tengo una vida maravillosa.Yo no tengo constancia de haber renunciado a nada, al menos a nada importante o tan interesante. De hecho... en este tiempo he cursado dos masters. Creo que ser mamás y papás nos enseña, además, a aprovechar más y mejor nuestro tiempo.
Hola a todos, Pues la verdad es que he renunicado (temporalmente), ha bastantes cosas. Pero, caray!!!, es que no podemos tenerlo todo, sobre todo si no eres millonario, bueno, mejor dicho, a no ser que no seas mileurista. Nosotros hemos tenido la suerte de tener a Joel (3 años y medio), y Laia (2 años), y la verdad es que me lo paso fenomenalmente con ellos. Eso sí, no ha sido fácil, sobre todo por las noches (estuvimos casi un año sin saber lo que era dormir más de dos horas seguidas), pero todo acaba volviendo a la normalidad. Eso sí, hay que cambiar el chip, ahora, durante un tiempo no podemos hacer lo que hacíamos cuando estabamos solos, pero es que hay que disfrutar de lo que tenemos ahora. Y en efecto, el tiempo vuela, así que a disfrutar!!!!
Na verdade existe uma mudança muito grande em nossas vidas, antes e depois da chegada de nossos filhos. Importante ressaltar que as coisas mudam, mas com certeza é muito prazeroso o relacionamento com essas coisinhas maravilhosas. Mudam principalmente nossa mentalidade, o senso de responsabilidade e de importância de cada minuto. No mais, é desfrutar em família essa coisa inexplicável que são as crianças!!!
Mis dos bebés hacen mi vida maravillosa. MI nena tiene casi tres años y el nene cinco meses. Somos muy felices desde que llegaron a nuestras vidas. Lo malo no es cuando renuncias sino cuando te obligan a renunciar, alguien responsable de RR.HH. de mi empresa me dijo que en mi "circunstancia" no podía aspirar a un puesto de mas responsabilidad. ¿Cual es la circunstancia? la cesarea no corta neuronas y estoy segura de que la maternidad agudiza el ingenio por lo que te puede beneficiar en el trabajo. Aún en en siglo XXI tenemos que aguantar estas cosas.
Yo creo que he renunciado un poco a "mi misma", la mayor parte del día no soy yo sino la mamá de... es maravilloso colaborar en el crecimiento de un niño, no hay duda, pero hay que dedicarle tiempo, tiempo que antes invertia en mis hobbies, mis amigos... ahora ese tiempo es tiempo express, poco y con la cabeza en los peques :-)
¿A qué he renunciado?...: a todo y a nada... Es decir, es tan distinta nuestra vida ahora que parecería que hemos renunciado a todo. Pero lo cierto es que, lo hemos cambiado por otras cosas. Lo que más ha cambiado es mi mentalidad; si antes sólo pensabamos en bebernos la vida a sorbetones, ahora nuestro hijo ocupa nuestros pensamientos hasta lo inverosimil!! Espero que merezca la pena, no tengo perspectiva para valorarlo, pero también sé, que no cambiaría por nada nuestra maternidad/paternidad. Gracias
Tengo un hijo de 3,5 años y otro de 6 meses.Yo tengo 38 años. ¿Cuanto tiempo dura la renuncia completa a mi desarrollo profesional, mis hobbies... 4 o 5 años? ¿Un 5% de mi vida adulta? Y eso ¿es tanto como para hablar de renuncia vital? Para mí desde luego no, pero si a alguien se lo parece lo mejor es que no tenga hijos, por el bien de todos: de los hipotéticos padres porque un 5% de tu vida es demasiado a cambio de todo lo que un hijo de puede dar, de los niños que sentirán la presión de estar de más en su propio hogar, y de la sociedad a la que se añadirán individuos problemáticos por falta de atención.
Para mí no hay momento más feliz que tumbarme en el sofá a ver una peli de Jackie Chan, con los gemelos Julito y Nico uno a cada lado. Como dice Sergio, la vida antes de los gemelos era genial, podía hacer lo que quisiera, viajes exóticos, conciertos, juergas nocturnas... Ahora con dos niños de casi 3 años, sin tener tiempo ni de abrir un libro, no sacrificaría ni un segundo con ellos por nada del mundo. Pero esto solo puede entenderlo alguien con niños, claro...Los viajes exóticos ya volverán, de todos modos vivimos en Shanghai, que aunque para nosotros ya no es exótico, sirve como consuelo... De momento, el próximo viaje toca en navidades, a Madrid a visitar a los abuelos :)
Es al haber tenido a mis hijas que he conocido el miedo; yo siempre fui valiente, atrevida frente a la vida, viajaba sola sin el menor miedo, vivía el día a día rozando lo "peligroso"sin temor; pero ahora cada minuto tengo terror de que les pueda pasar algo a ellas, pienso en el sufrimiento de las madres que han perdido a un hijo, tiemblo al imaginarme el perderlas...
Vaya si te cambian la vida! Ami me van a cambiar hasta el trabajo!. Tengo una niña que cumple 13 meses pasado mañana. Mi marido no está mucho en casa por razones de trabajo, así que yo he decidido dejar el mío para poder atenderla mejor. No tengo energía cuando vuelvo de trabajar para poder ocuparme de ella yo sola, y me apetece poder darle la educación que realmente quiero para ella, no la que le den en la guardería o una niñera. Mientras me lo pueda permitir no trabajaré e intentaré disfrutar de ella y de mi tiempo. Siento que de algún modo estoy sacrificando mi carrera, pero al mismo tiempo creo que en estos momentos es lo que tengo que hacer. Nunca es el momento adecuado, a veces simplemente hay que saltar a la piscina y preocuparse después de cómo salir.
mi vida siempre tuvo sentido, mi familia, mi trabajo ( nada sedentario) mis aficiones, despues de Sergio 35 meses y Alejandro 16 meses, me pregunto como tenia una vida tan aburrida. Cierto es que nuestros hijos han llegado en mi madurez (46 años) y las prioridades han cambiado, pero creo que sin dejar de lado nuestra pareja y el crecimiento personal la vida nos regala la ocasion de sentirnos plenos, mas humanos, grandes maestros ,menos egoistas.....
Deje de ser YO para convertirme en el papa de ELLOS...y eso estuvo BIEN, pero es un ejercicio de "despersonificación" que se aprende todos los días...por la calle me saludan (ultimamente, con la más pequeña, tengo otros 2 varones) y me dicen "Adios, papa de Susana!!"
Nuestra vida era antes más cómoda, vivíamos el día a día sin importarnos el futuro. Desde que ellos llegaron nuestras vidas han cambiado, vivimos para ellos, para nuestra familia. Hemos renunciado a muchas cosas, pero ahora cada día es agotador y a la vez maravilloso.Madre de dos peques de 6 y 3 años.
Desde luego que te cambia la vida el tener un hijo, estás 24 horas pendiente de el y casi no tienes tiempo de preocuparte por ti. Para mi es una experiencia maravillosa, lo mas bonito que me ha ocurrido en la vida. He dejado de trabajar y me dedico a tiempo completo al cuidado de Paulo. Sinceramente: Vale la pena vivir la experiencia, es unica
Soy padre de tres niños y con los dos de mi segunda esposa tenemos cinco, imagínense... sobre cómo te cambian la vida: depende de cómo asumes tu paternidad, si alguien dice que pudo hacer dos masters con tres hijos, habría que preguntarle cómo lo paso su pareja; y creo que debería estarle muy agradecido. Cuando tengo tiempo de ponerme a pensar en estas cosas, les agradezco a mis hijos por haberme dado la oportunidad de esforzarme por ser cada día, en cada acto y hasta pensamiento, una mejor persona. En realidad se los debo a ellos.
Yo creo que no he tenido que renunciar a nada. He tenido que dejar ciertas cosas en las que antes, por disponer de mucho más tiempo, participaba. Pero el conocimiento, el crecimiento personal, el aprendizaje que va implícito en el acto de convertirse en padres, estoy segura de que no lo iba a encontrar en ningún curso o máster que pudiese hacer. Este es un trabajo a tiempo completo que te exige atención constante y uno quiere hacerlo lo mejor que sabe porque lo que deseas es ver, algún día, personas a gusto consigo mismas, críticas con lo que ven u oyen, con ganas de mejorar el mundo, de aportar cosas nuevas,....Es la labor más importante que tenido nunca. Por eso no he tenido que renunciar a nada, simplemente uno pone las energías en otros proyectos
En mi caso, los tres años llegan mañana. Tres años maravillosos, intensos, reveladores sobre mi misma y sobre mi pareja. Sobre la capacidad de renuncia de cada uno, de adaptación, de maravillarse ante la personita que crece bajo nuestro cuidado. Una personita con carácter, inteligente intelectual y emocionalmente....Y yo, afortunada por poder vivirlo, minuto a minuto, día a día.¿ Renuncias? Pocas, la verdad... Simplemente vas postponiendo cosas. Y feliz!
cina veja
...como sea para cada uno de vostr@s, para mí, por todo lo visto y vivido de muy cerca, es una sucesón, una cadena de renuncias, unas mas grandes que las otras, no podría con ello... pero por FORTUNA no tod@s somos ni sentimos igual, y l@s otros complementan o son la mayoría que tiene hij@s y así la especie humana continua...menos mal !!, gracias!...un saludo,
nosotros somos unos felices esclavos de un bebe de 10 meses, pero no hay nada que nos guste mas! es genial, y esto es solo el principio ;)
Soy mamá de Iván y Darío (8 y 3 años). Pospones cosas, ya se harán cuándo sean mayores, corres, corres, corres.... Conversaciones de adultos con mi pareja de no más de 2 minutos o bien a partir de las 21:00h, si no estamos muy cansados.... Pero son la vida, todo para ellos ya nada se puede hacer sin pensar en ellos, ES MARAVILLOSO
Hola a todos, Supongo que ya todos de una manera u otra habéis explicado lo que supone tener un hijo. Habéis sido sinceros, a pesar de que a alguién que no haya tenido hijos le pueda parecer, vuestros comentarios, ingenuos o melosos. Yo, quizás todavía influida por las hormonas, Tiago ya tiene el año pero todavía le doy el pecho, estoy totalmente de acuerdo con lo dicho. Sobretodo con aquellos que dicen, que no es que las cosas de tu vida cambien sino que mas bien cambian en tu mente, en tu manera de percibir tu vida. Ya no eres tú y tu pareja, ahora es Tiago y nosotros. Si cambia algo esel modo en el que consigues ser feliz , estar satifescha contigo misma.
no sabemos q es la vida hasta q tenemos hijos...así pienso después d mi hija lena d 18meses:)para mi es una invitación a la paz interior y al amor constante.(casi na).
a una amiga que no sabia si queria tenr un bebe le dije sobre mi experiencia que a mi marido la vida le ha cambiado con la llegada de nuestro hijo, a mi se me ha acabado la que conocia y ha empezado una nueva que no cambiaria por la anterior. Despues de muchos años luchando por mi carrera profesional y habiendo logrado con mucho esfuerzo una prometedora carrera, lo deje todo al acabar mi baja maternal y reconocer que no podia separarme de mi hijo y perderme todo lo que iba a venir, despues de un año de esto soy feliz. muy feliz, el es el gran proyecto de mi vida.
Esta semana mi hijo "mayor" ha cumplido tres añitos. El pequeño está a punto de cumplir uno. La vida cambia, desde luego, Entras en un mundo distinto, en tu grupo de amigos poco a poco vamos entrando todos en ese mundo nuevo. De hablar de la Liga de Fútbol te conviertes en un experto en productos infantiles, sillitas de coche y un largo etc. Con el tiempo (mucho tiempo) me imagino que vuelves a retomar las cosas que has dejado apartadas. Al principio luchas un poco para no cambiar tus hábitos, pero llega un momento en que ves que no hay remedio, que ellos ganan, y que si toca el biberón ya te puedes olvidar de la F1 durante un rato.Otro aspecto que descubres cuando tienes hijos son las dificultades de la conciliación laboral y familiar. Soy maestro de primaria, lo ideal para tener hijos, teóricamente, estás en un ambiente profesional donde un trabajador con hijos debería ser arropado y comprendido pues tenemos una conciencia especial respecto a las necesidades de nuestros alumnos. Pues nada más lejos de la realidad, al menos en algunas vivencias que he tenido estos años. Resulta que si tu hijo se te pone enfermo tienes casi que ocultarlo pues no está bien visto que te tengas que quedarte con él en casa. Prácticamente te invitan a que busques a quien sea, vecinos, amigos... y les confíes a tu hijo con 39 de fiebre como si fuera lo mismo que cuidarte las plantas en verano. Los maestros somos un gremio muy presionado para cuidar al máximo a nuestros alumnos, legalmente se nos dice que debemos hacerlo como "diligentes padres". Pero luego esa diligencia no se nos permite tenerla para nuestros propios hijos.Este es un ejemplo de los muchos que seguro que todos hemos tenido la mala suerte de tropezar durante estos años. Pero hay que seguir adelante, en mi casa llevamos tres años de cambios, y los siguientes tres traerán más cambios, y los otros y los otros... Y estamos deseando disfrutar de las nuevas sorpresas que nos depararán nuestros dos pequeños.Un saludo.
Soy Adriana, Madre de Pablo....ahora sé que Madre se escribe con mayúscula, e HIJO con mayúscula fija, subrayado y en negrita. Por encima de mis títulos profesionales ahora está cuidarlo y educarlo, enseñarlo a hacer el bien a los demás y a amar a Dios … eso requiere tiempo, Enseñarle que para decir la verdad no se necesita dominar tres idiomas, y tampoco para pedir perdón, que de nada sirve ganar en el juego si no se juega limpio, y la vida toda es un juego y se debe jugar limpiamente, enseñarle que los juguetes cuestan, y debe cuidarlos, que no los puede tener todos a la vez pues no los necesita ….enseñar los valores fundamentales requiere tiempo( y de paso practicar yo misma otros tantos, la paciencia p.ej, la que más me cuesta), con hijos o sin ellos los días siguen teniendo 24horas, así que la ecuación es sencilla: Menos dinero, y más tiempo para mi HIJO, menos gustos para mi y más compañía para Él. Por fortuna a mis 36 los pies ya no crecen más, asi que mis zapatos viejos aguantan otro poquito, y son desplazados por unos piecitos que brincan, saltan, trotan, y galopan...y al parecer no conocen el agotamiento....pero si la felicidad
Lo más hermoso de la vida son los hijos. Nos cambian laos hábitos, las costumbres, en un sentido positivo. Nos enriquecen, porque con ellos aprendemos a darlo todo, sin esperar retribuciones.
Tengo una pitufi de cinco años y otra de año y medio. .....¡Echo tanto de menos las siestas!
Bueno... que cada uno se engañe como quiera, con eso de que es maravilloso, pero ser padres no os diferencia del resto de los animales, yo no pienso tener ninguno, espero que todos tengais muchos porque tienen que pagar mi pensión.
HolaTengo dos niñas gemelas de 22 meses, así que no hace falta que os cuente que no tengo tiempo para casi nada, por suerte he cogido reducción de jornada y su papi no trabaja por las tardes, pero aún así es un no parar, y eso que son buenas y duermen bien....Echo de menos ir a cine, pasear de la mano y estar una tarde en el sofá viendo pelis antiguas....ainsss pero por suerte se acuestan pronto y por las noches todo es paz y podemos ver nuestras series favoritas y leer y desconectar de Pokoyo y Mickey.......jajajajaYolanda Muñoz
Hace unas semanas me hacía la siguiente reflexión, condensando uno poco esas mismas sensaciones (he tenido tiempo de pensarlo en los diez años que llevo siendo madre): Hubo una época en que solo vivía mi presente, echando algún vistazo al futuro. Desde que nacieron mis hijos, sé que vivo su presente, el mío se ha estancado y está supeditado al suyo (¡ojo, no me quejo!), aunque cada vez se dejan menos. El día que no se dejen en absoluto, no sé si sabré retomar mi presente donde lo dejé, o si podré volver a pensar en futuro, o si me refugiaré en el pasado. Ya lo pensaré mañana...
Cecilia, me quedo sorprendido por lo que leo. Dos niños ya... Cómo pasa el tiempo. Como no recuerdas, te diré lo que hacías cuando no tenías niños: te sentabas a mi lado a escribir noticias, en MHoy... Qué tiempos; si no recuerdo mal, prácticamente yo era el único en toda la redacción con hijos. Besos
Que menos que disfrutar cada segundo de los niños. Sí, a veces una siesta, un libro, un poco de tiempo para uno...pero aún así. Quien lo cambiaría??
tener hijos te cambia la vida, eso es un hecho. Hay gente que no lo asume y vive la paternidad con amargura, y otros preferimos disfrutarla a tope, aunque seamos conscientes de que la conciliación es difícil y que el tiempo que podemos pasar con ellos es escaso pero debe ser de calidad. Yo, particularmente, agradezco a mi madre los ratos que me hace de canguro para que pueda continuar con mi hobbi (estudiar una lengua extranjera), y a las 2 horas de transporte público que tengo cada día porque es cuando encuentro tiempo para leer o ver series de televisión.
tener hijos te cambia la vida, eso es un hecho. Hay gente que no lo asume y vive la paternidad con amargura, y otros preferimos disfrutarla a tope, aunque seamos conscientes de que la conciliación es difícil y que el tiempo que podemos pasar con ellos es escaso pero debe ser de calidad. Yo, particularmente, agradezco a mi madre los ratos que me hace de canguro para que pueda continuar con mi hobbi (estudiar una lengua extranjera), y a las 2 horas de transporte público que tengo cada día porque es cuando encuentro tiempo para leer o ver series de televisión.
Yo no he tenido hijos. Sinceramente me alegro. Es algo que ni se me ha pasado por la cabeza.
Yo estoy esperando al tercero... o sea, que no tengo que demostrar a nadie que me gusta tener hijos, mirarlos, achucharlos, disfrutarlos, sufrir un poquito de vez en cuando pero sobre todo sentir que no me estoy perdiendo absolutamente nada de su vida (4 recién cumplidos y 2). Tengo una carrera, un trabajo, he hecho un doctorado, pero todo eso ahora no es lo más importante.... Tengo jornada reducida a la mitad para poder disfrutar y cuidar de mis peques, verlos crecer felices y aunque es lo más cansado del mundo (reconozco que en el trabajo estoy más relajada) también es lo más gratificante. Ya tendré tiempo más adelante de escribir artículos científicos, ir a congresos y ser superespecialista de algo, porque ellos crecen tan rápido que me permitirán hacer todo eso dentro de unos años. Claro que echo de menos estar tranquila con mi marido, irnos un fin de semana, hacer más deporte... pero soy adicta a mis peques, ¡qué le voy a hacer!!
Hola a todos!La verdad es que nuestra hija lo ha cambiado todo. Antes vivíamos muy centrados en el trabajo, de lunes a viernes, y en actividades al aire libre,los fines de semana y las vacaciones, no importaba si llovía o hacía frío (y vivo en Noruega, así que puede hacer bastante frío :)) Cuando nos quedamos "embarazados" pensamos que salvo condiciones extremas, la vida que haríamos era similar... pero que equivocados estábamos. Cuando nació nuestra hija era diciembre y hacía -21ºC, así que nos recomendaron no sacarla de casa el primer mes, y además de eso, si hace -12ºC tampoco recomiendan que los niños estén fuera más de lo imprescindible, así que no fue un comienzo fácil estar en casa sin salir las 24 horas y sin familia cerca. Pero había cambios adicionales, nuestra hija tenía cólicos muchas horas al día y cuando los superó, nos dimos cuenta que tampoco le gustaba estar fuera de casa, ni que nos separásemos un minuto.Ahora tiene casi un año (la baja maternal en Noruega es de un año), y la pediatra nos ha recomedado que esté en casa otro año... así que me dedico a ella de día y a mi propia empresa cuando ella se va a dormir. Las jornadas son agotadoras, a pesar del apoyo de mi marido. Además de eso practicamos la crianza natural "attachment parenting", así que creemos que lo mejor para ella es el colecho, con todas las medidas de seguridad oportunas, responder al primer lloro, tenerla mucho en brazos, el no usar cochecito sino una bufanda elástica especial para "portearla" y hemos tenido que oir todo tipo de críticas de la familia que nos tachaba de estar malcriándola.Afortunadamente, contra muchos pronósticos, le empieza a gustar estar fuera, la llevamos de paseo cuando no hace mucho frío, y a la piscina. Ya me deja ir al cuarto de baño sin gritar (desde hace un par de semanas) y está creciendo feliz y sana, que es lo que cuenta... quizás, simplemente necesitaba un poco más de tiempo que otros niños, pero no creo que haya nada malo con eso.Todo ha merecido sobradamente la pena.Saludos y suerte a todos,María

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Sobre la firma

Cecilia Jan
Periodista de EL PAÍS desde 2004, ahora en Planeta Futuro. Ha trabajado en Internacional, Portada, Sociedad y Edición, y escrito de literatura infantil y juvenil. Creó el blog De Mamas & De Papas (M&P) y es autora de 'Cosas que nadie te contó antes de tener hijos' (Planeta). Licenciada en Derecho y Empresariales y máster UAM/EL PAÍS.

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