El nuevo presidente del TSJC no se pronuncia sobre el juez Solaz

Ni bien, ni mal, sino todo lo contrario. Miguel Ángel Gimeno, nuevo presidente del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña se ha estrenado esta mañana ante los medios de comunicación evitando pronunciarse sobre la actuación del juez Juli Solaz, encargado de la investigación del saqueo del Palau de la Música. "Se trata de un acto jurisdiccional y no haré ninguna valoración", ha asegurado Gimeno, quien a renglón seguido ha añadido que "defenderá la libertad" del juez para actuar como crea conveniente. Gimeno, como Solaz, pertenecen a la asociación progresista Jueces para la Democracia, la misma en la que están adscritos los magistrados Santiago Vidal y María Sanahuja, expedientados por el Consejo General del Poder Judicial por cuestionar la investigación realizada por el titular del Juzgado de Instrucción número 30 de Barcelona.

El nuevo presidente del TSJC sí se ha pronunciado, en cambio, sobre el uso de la prisión provisional. "Es uno de nuestros defectos y no podemos estar orgullosos", ha añadido. Al ser preguntado sobre qué le parecía que Fèlix Millet estuviese en libertad y cualquier delincuente habitual acabase en prisión ha negado que eso ocurriera. "La percepción que se tiene a veces no se corresponde con la realidad", por lo que ha pedido a los medios un "acto pedagógico y didáctico". En otro momento ha afirmado que "Millet está en la calle porque no se le ha juzgado" y ha asegurado que "la administración de justicia no es mejor ni peor que el resto de las instituciones y servicios".

Por lo demás, Gimeno ha explicado los objetivos que se propone en el cargo: acercar la justicia a la sociedad civil, utilizar los recursos disponibles y mejorar el trato que reciben los ciudadanos de la justicia. Tampoco ha querido entrar en la polémica sobre el anuncio de la Asociación Profesional de la Magistratura de recurrir su nombramiento, al considerar que no responde a los principios de "igualdad, mérito y capacidad". Para Gimeno "es razonable que piensen que su candidata tiene más méritos, pero decide quién decide", en referencia al Consejo General del Poder Judicial. Sobre Alegret ha afirmado que "ha hecho un buen trabajo". Miguel Angel Gimeno tiene 60 años y lleva 23 en la carrera judicial, la mayoría de ellos en secciones penales de la Audiencia de Barcelona. Anteriormente había ejercido como abogado.