El alcalde de Valladolid acusa a la ministra de Cultura de azuzar a los actores contra él

Como un gato en una madeja de lana, el alcalde de Valladolid, Javier León de la Riva (PP), sigue enredado en la polémica que desencadenó él mismo la semana pasada cuando realizó públicamente unas declaraciones machistas sobre Leire Pajín. El regidor dijo que la nueva ministra de Sanidad iba a ser "la alegría de la huerta, repartiendo preservativos a diestro y siniestro" y que cuando veía sus "morritos" siempre prensaba "lo mismo". Sus manifestaciones merecieron el reproche hasta de los miembros de su partido, excepto el de Mariano Rajoy, que ha escurrido permanentemente la condena a esos comentarios sexistas.

Pero León de la Riva, que ya es un veterano de la mofa machista y de los enfrentamientos sonados (definió a Chacón como la señorita Pepis vestida de soldado), lejos de refugiarse en un perfil bajo y esperar a que escampe, ha sacado las uñas. Otra vez contra una mujer. El alcalde de Valladolid ha acusado a la ministra de Cultura de "despreciar" este fin de semana a la Seminci y a la ciudad, y de "coaccionar" a los integrantes de las diferentes películas, entre ellos Antonio Banderas e Icíar Bollaín, para que le hicieran "el vacío", informa Europa Press.

A su llegada a Valladolid, durante la visita al Claustro del Palacio de Santa Cruz, González-Sinde rechazó saludar al alcalde y, en declaraciones a los medios, anunció su intención de no acudir a la apertura de la Seminci tras las manifestaciones del edil sobre Pajín.

León de la Riva ha considerado hoy que la titular de Cultura es "muy libre" de tomar una actitud que "respeta pero no comparte". Sin embargo, la decisión de no asistir a la inauguración del festival le parece una "incorección", ya no con él sino "con la ciudad de Valladolid, con los aficionados al cine, con la Seminci y con los que han estado un año trabajando para organizar la Semana Internacional de Cine".

De la Riva ha lamentado "no que hiciera un desprecio al alcalde de Valladolid", pues "ya lo tenía asumido", sino que "coaccionara" a los integrantes de las películas que se presentaban para que "evitaran cualquier contacto con el alcalde", algo que le confesó, según su testimonio, "más de uno de ellos".

"Hacerle el vacío"

El primer edil ha explicado que desde el principio González-Sinde advirtió de que acudiría a la inauguración pero no a la proyección de la película inaugural, de Icíar Bollaín (También la lluvia), dado que es amiga personal suya y ya la había visto. Por el contrario, lo que "no dijo", según De la Riva, es que había ido a invitar tanto a Banderas como a Bollaín a que hicieran "el vacío" al alcalde.

De esta forma, ha continuado el primer edil, pasaron por la alfombra roja diversas personas, entre ellas los productores de la película de También la lluvia, uno de los cuales es amigo personal suyo y le dijo que aunque tenía la "consigna" de no saludarle, no "admitía" este tipo de presiones y estuvo charlando con él, "momento que aprovecharon Bollaín y el resto del equipo para pasar por detrás y obviar el saludo".

Por otro lado, Francisco Javier León de la Riva ha asegurado que Antonio Banderas también confesó que había estado "muy presionado" y se limitó a hacer un saludo cortés, aunque tanto el alcalde como la concejal de Cultura, Comercio y Turismo, Mercedes Cantalapiedra, ya habían estado con él horas antes en el Teatro Calderón, por ello hizo "sin más" una sonrisa "correcta" a su llegada a la gala inaugural.