La administración deberá indemnizar a un niño herido por un petardo olvidado en un parque
El menor, que manipuló el petardo con un mechero, perdió varios dedos en la explosión
El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha condenado a la Generalitat y al Ayuntamiento de Cornellà (Barcelona) a indemnizar con 47.115 euros a un niño que resultó herido durante una excursión escolar por la explosión de un petardo olvidado en un parque, tras un espectáculo pirotécnico.
En su sentencia, el TSJC condena al ayuntamiento y a la Generalitat a pagar un 70 y un 30%, respectivamente, de la indemnización al menor -que perdió varios dedos en la explosión y sufrió heridas en los oídos, los brazos y la cara- por su responsabilidad en la limpieza del parque y en la vigilancia de los niños.
El menor, de 13 años, resultó herido el 19 de junio de 2001, al explotar un petardo que encontró abandonado en el parque Can Mercader de Cornellà (Barcelona) el 19 de junio de 2001 mientras lo manipulaba con un mechero. Dos días antes, en el parque se había realizado un espectáculo pirotécnico para cerrar la fiesta mayor de Cornellà y, tras los fuegos, quedaron en el lugar varios petardos sin explosionar, de uso profesional. Uno de esos petardos fue el que manipuló la víctima, que había acudido al parque público de Cornellà junto a un centenar de alumnos del instituto Esteve Terrades, acompañados de cinco profesores del centro educativo.
En su sentencia, el tribunal considera que el ayuntamiento incumplió su obligación de limpiar e inspeccionar la zona donde se celebró el espectáculo pirotécnico para eliminar cualquier riesgo de petardos sin explosionar. Asimismo, el TSJC responsabiliza también al centro educativo del accidente, por considerar que, dado que el lugar presentaba restos evidentes de explosiones pirotécnicas, los profesores debían haber extremado las medidas de precaución así como "establecer con claridad los límites y la vigilancia". Según el tribunal, está acreditado que los profesores no estaban dentro del campo de visión del accidente, por lo que "la vigilancia ha de entenderse que no fue suficiente ni adecuada".
