Rubalcaba: "No tengo información de que vaya a haber tregua de ETA"

El ministro del Interior, Alfredro Pérez Rubalcaba, ha salido al paso de unas declaraciones realizadas esta mañana por el líder del PP vasco, Antonio Basagoiti, en las que aventuraba que ETA podría estar preparando una declaración de tregua "en las próximas semanas" con el propósito de condicionar el resultado de las elecciones. Desde la localidad italiana de Varese, donde se celebra un encuentro de ministros europeos, Rubalcaba ha dicho que "no tiene ninguna información, ni de que la vaya a haber (una tregua) ni de que no la vaya a haber".

En todo caso, Rubalcaba ha despreciado cualquier posibilidad de que los terroristas puedan distorsionar el debate político en el País Vasco. "Es irrelevante desde el punto de vista de las elecciones, porque a las elecciones va quien cumple las reglas y eso no tiene nada que ver con que haya tregua o no. Por lo tanto ni tengo información ni tiene nada que ver", ha agregado.

Una tregua trampa

Antonio Basagoiti ha avisado este sabado que ETA podría anunciar una tregua en julio, para que la izquierda abertazle "se cuele" en las elecciones. Ante la posibilidad de que esta hipótesis se convierta en realidad, el líder popular en Euskadi ha pedido al Gobierno que no baje la guardia e intensifique la lucha antiterrorista y "detenga todavía más" integrantes de la banda, después de que la semana pasada fuera detenido el jefe de ETA, Mikel Kabikoitz Karrera Sarobe, Ata, en Bayona (Francia).

"Será una tregua farsa, más que nunca, que estará preparada para colarse en las elecciones y para salir de la debilidad de los comandos y de la debilidad política, para volver a coger aliento", ha dicho.

Las declaraciones de Basagoiti se producen en medio de un escenario novedoso en el mundo de la izquierda abertzale. Hace un mes la dirección de la ilegalizada Batasuna pidió a ETA, desde Pamplona, que no fuera un obstáculo para sus planes políticos. Y hace dos semanas ocho presos históricos de ETA publicaron una carta dirigida al colectivo de presos en la que, por vez primera, le plantean el "reconocimiento-reparación de los daños causados" a las víctimas del terrorismo.