La mortalidad se reduce en la 'zona 80' y sube en la corona circundante

El director del Servicio Catalán del Tráfico (SCT), Josep Pérez Moya, ha defendido hoy de nuevo la limitación de la velocidad en los accesos a Barcelona y ha desvelado que la mortalidad ha aumentado en la corona de diez kilómetros que circunda la denominada zona 80, donde la siniestralidad sigue a la baja.

Pérez Moya ha insistido en que la aplicación de la limitación de la velocidad a 80 kilómetros por hora en los accesos a Barcelona -vigente desde hace dos años-, ha permitido reducir al 50% la mortalidad y las congestiones en la zona 80, mientras que por contra en el perímetro de 10 kilómetros que la envuelve se ha pasado en dos años de 3 a 6 muertos al año.

Según Pérez Moya, la reducción de la mortalidad y de las congestiones en la denominada zona 80 es un valor "que no se puede discutir". Por ello, ha pedido que se espere hasta junio, cuando se conocerán los datos medioambientales sobre la reducción o no de la contaminación en la zona 80, para abordar el debate sobre si se debe modificar el actual funcionamiento de esta limitación.

Evitar "frivolidad"

A su juicio, ahora sería una "frivolidad" lanzar "especulaciones" sobre futuros cambios porque antes de tomar una decisión se tienen que analizar los datos y "explicarlo muy bien". En cualquier caso, más allá del ámbito medioambiental, Pérez Moya ha hecho una encendida defensa de los beneficios que la limitación de la velocidad ha tenido tanto para combatir la siniestralidad como para reducir las congestiones en los accesos a Barcelona.

En concreto, en la zona 80 la tendencia a la siniestralidad ha experimentado un acusado descenso, ya que en 2007 -antes de la entrada en vigor de la medida- hubo 658 accidentes, con 12 muertos, 55 heridos graves y 861 leves, mientras que en 2009 estas cifras han bajado hasta alcanzar los 554 accidentes, con seis muertos -la mitad que hace dos años-, 32 heridos graves y 735 leves.