Sale a subasta en Barcelona un soneto manuscrito de Lorca
La obra, sin título y dedicada a la violinista catalana Nieves Gas, va ilustrado con un retrato femenino
A casi 1.000 euros la línea. Ese es el precio que salen de media las 14 líneas del soneto manuscrito que Federico García Lorca dedicó en 1932 a la violinista catalana Nieves Gas y que, con un montante de 12.000 euros de salida, se subasta el jueves en Barcelona. El soneto, sin título pero con la dedicatoria y con 'autobiografía subliminal', va ilustrado con un retrato femenino de un solo trazo y tan estiloso y filiforme como la famosa firma del poeta, con esas 'efe, jota' y 'ele' tan altas y tan queridas por él.
No es un soneto cualquiera, como debía saber su hasta ahora propietario, "un coleccionista nacional", según la reservada información al respecto que ha facilitado a este diario la casa de subastas Soler y Llach. En cualquier caso, el contexto es conocido. Lorca había marchado a Estados Unidos tras su enésimo desengaño amoroso y desesperado ante la difícil asunción de su homosexualidad. En 1932, ya de regreso en España y director de la compañía de teatro universitario La Barraca, realizó el 16 de diciembre una lectura en el hotel Ritz de Barcelona, titulada Nueva York en un poeta, organizada por el exquisito Conferentia Club. Lorca, que explicará y recitará algunos de sus recientes poemas surrealistas, es ya por entonces un autor de renombre. Por ello, entre los asistentes se encuentran personajes como el reconocido crítico de arte y periodista Sebastià Gasch, el vanguardista poeta Josep Vicenç Foix o uno de los grandes nombres de las letras catalanas del momento, Josep Maria de Sagarra.
También está entre los asistentes la joven violinista Nieves Gas quien, junto a su hermana pianista Herminia, era un destacado valor musical catalán de la época. Presentada al poeta al final del acto, a ella irá dirigida un soneto en el que si ya los dos primeros versos se nota la tristeza fruto de la incomprensión de la que se siente rodeado -"Yo sé que mi perfil será tranquilo / en el norte de un cielo sin reflejo" y sigue con un descorazonador "Mercurio de vigilia, casto espejo / donde se quiebra el pulso de mi estilo"- y en el doceavo se acaba describiendo como "libre signo de normas oprimidas". Poeta en la tortura.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Últimas noticias
Sébastien Lecornu, primer ministro de Francia, recurre a una ley de emergencia ante la ausencia de presupuestos
Sheinbaum pasará las vacaciones de Navidad en Acapulco tras dos años de Otis
George Clooney rinde homenaje a su hermana tras su muerte por cáncer: “Ada era mi heroína. Amal y yo la extrañaremos mucho”
Muere el músico británico Chris Rea a los 74 años
Lo más visto
- Lotería de Navidad 2025, en directo | 79432, el Gordo de la Lotería de Navidad
- Así te hemos contado las elecciones en Extremadura | El PP gana en Extremadura con 29 escaños, pero necesitará para gobernar a un Vox que crece
- Comprobar Lotería de Navidad 2025: consulta la pedrea con los números premiados
- Los jueces del Tribunal Penal Internacional se rebelan ante las sanciones de Trump: “No hay que ceder”
- Oona Chaplin: “Le conté a James Cameron que vivía en una cabaña en los árboles y que estaba iniciando un proyecto de permacultura con una amiga”




























































