La Policía interviene un alijo de cocaína en el depósito de combustible de vehículos

Agentes de la Policía Nacional han incautado un alijo de cocaína destinado a Ibiza y que estaba camuflado de una forma inusitada. Los delincuentes habían ocultado la droga, envasada al vacío, en el interior de los depósitos de combustible de vehículos. En total, se han intervenido de 5,5 kilos de cocaína que iban a ser distribuidos en zonas de ocio de la isla ibicenca y ha detenido a los nueve miembros de la organización criminal que contaba con ramificaciones en Madrid y Barcelona.

La investigación se inició hace más de un año por el GRECO de Ibiza, adscrito a la Comisaría General de Policía Judicial, y se ha desarrollado en distintas fases. Las primeras detenciones se produjeron a finales de 2008. Entonces, otras cinco personas fueron arrestadas cuando intentaban introducir en la isla más de dos kilos de cocaína que también habían camuflado de forma insólita.

En esa ocasión la cocaína iba en los dobles fondos que se habían realizado a las zapatillas de deporte que calzaban. Las gestiones policiales continuaron al comprobarse que los cabecillas seguían actuando.

De Barcelona a Ibiza

Los responsables de esta organización se desplazaban a Barcelona para negociar la adquisición de la sustancia estupefaciente. Una vez formalizada la operación, regresaban a Ibiza, donde otro miembro del grupo se encargaba de buscar a un "correo". En cada envío de estupefaciente utilizaban a una persona distinta y, además, empleaban de forma aleatoria los puertos de Barcelona y Denia para así dificultar el control policial.

Los responsables de la organización gestionaban el billete de barco y el alojamiento en Barcelona del "correo", el cual iba siempre acompañado por un miembro del grupo que tenía la misión de controlarles y alertar a la organización en caso de presencia policial.

Cuando la droga llegaba a la isla, era entregada a los cabecillas que, de forma inmediata, la enterraban en una zona previamente controlada y de difícil acceso, próxima a sus domicilios, para dejarla enfriar. El estupefaciente era distribuido habitualmente en verano en las zonas de ocio de la isla, de hecho dos de los detenidos trabajaban como dj's y otro era productor musical.

Poca gasolina, mucha cocaína

Los investigadores detectaron que la organización estaba planificando una nueva operación e intensificaron su control. Uno de los miembros del grupo y el correo contratado se desplazaron a Barcelona, donde ya se había adquirido la droga, y regresaron con la mercancía a Ibiza. A su llegada al puerto de San Antonio, los agentes detuvieron a ambos sujetos y registraron el vehículo. Tras una minuciosa inspección lograron localizar la mercancía oculta en el depósito de combustible del coche. La cocaína estaba distribuida en paquetes envasados al vacío y flotaba sobre el combustible. En total se intervinieron 4.300 gramos de estupefaciente.

En los registros de los domicilios de los detenidos se encontró una pistola del calibre 9 milímetros parabellum y varias maquinas de envasar al vacío utilizadas para cerrar herméticamente los paquetes de cocaína y evitar que se estropeara durante el tiempo que permanecía oculta en la tierra o en los depósitos de gasolina.

Un abogado mediador

Entre los detenidos en esta operación se encuentra un abogado penalista, muy vinculado con la isla de Ibiza, quien por su profesión mantenía estrechos contactos con diversos grupos de narcotraficantes.

Este sujeto había actuado como mediador entre uno de los miembros de la organización y un grupo de prestamistas colombianos. Así el traficante podría saldar una deuda contraída con el abogado.