Un 3,7% más de recaudación por multas de tráfico

Los Presupuestos Generales del Estado contemplan que el Gobierno recaude el año próximo 432 millones de euros en multas de tráfico, lo que supondrá un 3,7% más que en 2009. Desde que entró en marcha el carné por puntos, en 2006, la recaudación por este concepto se ha venido incrementando considerablemente. En 2005, la recaudación de la Dirección General de Tráfico derivada de las infracciones de los conductores ascendió a 192 millones de euros. Aunque ha sido en 2009 cuando las previsiones de recaudación medraron más, un 15%.

Este aumento en los ingresos se justifica por que en los últimos años se ha incrementado el número de radares, así como la presencia de guardias civiles en la carretera con el objetivo de "reducir el número de infracciones y, como consecuencia, el de accidentes", han asegurado fuentes de la DGT.

"Hay mayor presencia en la carretera de guardias civiles, más vigilancia, más número de radares y lo lógico es que se detecten un mayor número de infracciones", explicaron las mismas fuentes, que insistieron en que el interés de Tráfico es que haya menos infracciones.

Por otro lado, los ingresos por las tasas que gestiona la Dirección General de Tráfico, y que generan el 50% de los ingresos de la DGT, vuelven a caer por segundo año consecutivo. Concretamente, para 2010, el Ejecutivo espera recaudar unos 497 millones de euros, un 9,2 por ciento menos que en 2009 cuando se ingresó por esta razón 547,6 millones de euros.

Para la DGT, esta bajada en la recaudación de las tasas, que se une al descenso de un 2,2 por ciento que se produjo en 2009, se explica por la situación económica actual, ya que al descender el número de matriculacones de vehículos, y las personas que se examinan para sacarse el carné de conducir, el dinero que se ingresa en tasas también es menor.

El proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2010 contempla una partida de 846,86 millones de euros para políticas de seguridad vial, lo que supone un descenso del 1,8 por ciento respecto a lo previsto iniciamente por el Gobierno en 2009.

El texto subraya que la cuantía persigue conseguir una mejora progresiva en los niveles de seguridad y fluidez de las carreteras españolas, que permita reducir el número de accidentes de circulación en un 50 por ciento en un plazo de cinco años.

Concretamente, subraya que se seguirá incidiendo en la mejora del cumplimiento de la normativa, como el uso del cinturón de seguridad o el casco, y que se incrementarán "notablemente" los controles y la instalación de radares fijos y móviles, así como las actuaciones sobre tramos y puntos negros de accidentabilidad.

Igualmente, el Ejecutivo pretende aumentar la información del tráfico en tiempo real al usuario, antes y durante el viaje. Además, considera necesario llevar a cabo una reforma integral del procedimiento sancionador de tráfico, a partir de una simplificación del proceso y de la incorporación de la administración electrónica para el mismo.

El límite de velocidad de los radares al imponer una sanción es diferente