El PP acusa a De la Vega de irse de vacaciones a costa del erario
El Grupo Popular en el Congreso compara a la vicepresidenta con el presidente de Venezuela, Hugo Chávez
El PP ha decidido hacer sangre del desliz de la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, quien anunció en el marco de su gira por Centroamérica y Suramérica que la Fiscalía Anticorrupción iba a recurrir el sobreseimiento del caso Camps en el Tribunal Superior de Justicia de Valencia. El Grupo Popular en el Congreso ha pedido su comparecencia para que explique, precisamente, "las actividades reales" que la justifican" y ha registrado 19 preguntas sobre dicha gira.
En opinión del PP, el viaje de De la Vega no tiene justificación alguna ya que entre las competencias de la vicepresidenta primera no hay "ninguna relacionada con las relaciones internacionales", según un comunicado de la formación. El secretario general del Grupo Popular, José Luis Ayllón, ha calificado de "curioso" que en la última semana de julio el ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, estuviera de visita oficial en Brasil y que la vicepresidenta "vaya a reforzar nuestra relación bilateral con ese Estado tan solo unos días después".
Así, Ayllón ha comparado el viaje oficial de De la Vega con la situación de "los españoles que se aprietan el cinturón por la crisis" y no pueden pagarse unas vacaciones. Ayllón quiere saber cuáles son las motivaciones de la gira y qué resultados inmediatos se han extraído hasta ahora, además de exigir que se explique "qué motivo justifica la asistencia de todos y cada uno de los integrantes de la delegación española".
De la Vega, como Chávez
Para el PP, el viaje sólo ha servido para demostrar que la Fiscalía General del Estado no es independiente y que su máximo responsable, Cándido Conde Pumpido, se ha convertido en "Mayordomo Total del Gobierno".
Las comparaciones no terminan ahí. Para Ayllón, "cada día que pasa, De la Vega está adoptando más métodos de Hugo Chávez [presidente de Venezuela] en su persecución de la oposición", en referencia a las acusaciones de espionaje político lanzadas por la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal.
Los populares insisten además en la persecución por parte del Ejecutivo a los miembros del PP "como si de una cacería se tratara" y acusa a los socialistas de tratar de desviar la atención sobre "las sospechas que existen sobre altos cargos del Gobierno como el vicepresidente tercero, Manuel Chaves, o el ex director del Centro Nacional de Inteligencia Alberto Saiz".
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