Azpeitia despide a la última víctima de ETA
Cientos de personas acuden al entierro de Ignacio Uria. -El obispo de San Sebastián, Juan María Uriarte, oficia el funeral del empresario vasco. -Miles de ciudadanos participan en una manifestación de repudio a ETA
Cientos de personas han acudido este viernes a la parroquia de San Sebastián de Soreasu, en Azpeitia, donde se ofició el funeral por el empresario vasco Ignacio Uria, asesinado por la banda terrorista ETA el pasado 3 de diciembre.
El lehendakari, Juan José Ibarretxe, el líder de los socialistas vascos, Patxi López, los miembros del PP Soraya Sáenz de Santamaría y Antonio Basagoiti, participaron en las exequias fúnebres oficiadas por el obispo de San Sebastián, Juan María Uriarte, y una treintena de sacerdotes en la iglesia de San Sebastián de Soreasu, donde numerosos representantes políticos e institucionales arroparon a los familiares, amigos, trabajadores, vecinos y empresarios más cercanos al fallecido.
Pasadas las 19.15 horas, la comitiva fúnebre, compuesta por una furgoneta y seis vehículos que portaban numerosas coronas de flores, partió del tanatorio donde desde hace dos días se encontraba instalado el velatorio del empresario. En uno de estos coches viajaba la viuda de Uría, Manoli Aramendi, acompañada por algunos familiares, mientras que otros allegados, entre los que se encontraban hijos y hermanos del asesinado, seguían a los vehículos a pie en completo silencio junto a dos centenares de personas.
Entre las autoridades asisitieron al funeral se encontraban las ministras de Fomento, Magdalena Álvarez, y de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia; la también socialista Leire Pajín, el dirigente de EA Rafael Larreina; el líder de EB Javier Madrazo, y el de Aralar, Patxi Zabaleta. Acudieron además representantes empresariales vascos como Miguel Lazpiur y Eduardo Zubiaurre, el ex presidente del PNV Josu Jon Imaz, así como la viuda y una de las dos hijas del ex edil socialista de Mondragón (Guipúzcoa) asesinado por ETA este mismo año, Isaías Carrasco.
"¿El camino de la liberación"
El obispo de San Sebastián, José María Uriarte, ha denunciado que "un empresario que brinda trabajo" hay sido "eliminado violentamente" y ha aludido a la continuación de las obras de la Y vasca recriminando a ETA que trate de "neutralizar por la fuerza y la sangre derramada un proyecto avalado democráticamente".
"¿Es éste el camino para la liberación que ETA promete? ¿Qué liberación?", se preguntó el obispo, que se dirigió también a los empresarios amenazados por la violencia, subrayando que "sintonizamos con la pesadilla que muchos sufrís en vuestra carne y en la de vuestra familia". "Tenéis todo el derecho y la necesidad de contar en estos momentos con el apoyo neto de la sociedad y con la defensa eficaz de vuestra vida y bienes", añadió.
"ETA fuera"
Miles de ciudadanos, entre ellos destacados representantes políticos, participaron en la manifestación organizada por las instituciones y la patronal vasca en Azpeitia para expresar a ETA la repulsa de la sociedad vasca al asesinato del empresario Ignacio Uria. La marcha, convocada por el lehendakari, Juan José Ibarretxe, partió a las 20:50 de la plaza Pérez Arregi, contigua a la iglesia de San Sebastián de Soreasu, donde sólo unos pocos minutos tuvieron lugar las honras fúnebres por el empresario asesinado.
Dos hermanos del fallecido, Imanol y José María, una de sus hijas, Jaione, y el ex alcalde de Azpeitia Julián Eizmendi, abrieron la marcha con una pancarta en la que se podía leer el lema "ETA Kanpora" (ETA fuera), que también portaban todos los concejales de la corporación municipal, a excepción de los representantes de ANV.
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