Cae un gran capo colombiano de la coca
Arrestado en Madrid Beto el Gitano, buscado por la unidad anti drogas de EE UU
Era uno de los capos de la cocaína más buscados del mundo, pero se paseaba a sus anchas por España, hacía una vida ostentosa y se solía hospedar en hoteles de lujo. En uno de Madrid fue arrestado Edgar Vallejo-Guarín - alias Jairo Gómez y Beto el Gitano - tras una larga investigación de la Guardia Civil, el Cuerpo Nacional de Policía (CNP) y la agencia antidroga de Estados Unidos (DEA).
Beto el Gitano había cambiado totalmente su rostro, especialmente la nariz, uno de sus rasgos más característicos, y había adquirido una identidad falsa ?con el nombre de Jairo Gómez?, según explicaron ayer fuentes del Grupo de Fugitivos del CNP. Eso le permitía vivir sin ocultarse a pesar de ser buscado desde 2001 por la DEA, acusado del contrabando de más de 4.500 kilos de cocaína entre Colombia y Estados Unidos.
Se le consideraba uno de los capos más influyentes en los carteles colombianos y uno de los principales suministradores de drogas durante la década de los 90. Solía introducir la cocaína por la costa de Florida y sobre él pesaba una recompensa de cinco millones de dólares.
La operación comenzó en España en 2003, cuando la DEA notificó a las autoridades españolas que sospechaban que Beto Gitano estaba de vacaciones en la estación de esquí de Baqueira Beret, en el Pirineo aragonés. En una operación conjunta entre el CNP y la Guardia Civil, dos años después hallaron a familiares suyos en Cataluña donde comenzaron un seguimiento que ha durado hasta su detención.
"Estaba asentado entre Barcelona y Madrid, frecuentaba hoteles de lujo, desde donde sospechamos que dirigía las operaciones", explican las fuentes. Los investigadores creen que es posible que también operase con cocaína en Europa, además de en Estados Unidos, "aunque como se ocultaba en España no quería muchos problemas aquí para no ser descubierto", continúan.
Hace tres meses consiguieron seguir su pista de cerca. Las fuentes añaden que ha sido difícil por el cambio de su identidad. Se hicieron con muestras de sus huellas dactilares, proporcionadas por las autoridades de Canadá gracias a una detención allí hace años. Las cotejaron con las de su permiso de residencia y descubrieron que la identidad de Jairo Gómez correspondía realmente a Edgar Vallejo-Guarín. Finalmente, consiguieron detenerlo en el hotel Meliá Fénix de Madrid el pasado jueves por la noche.
Las autoridades de Estados Unidos, que le imputan al menos cuatro delitos por los que podría ser condenado otras tantas cadenas perpetuas, anunciaron ayer que pedirán la extradición de Vallejo-Guarín.
En una nota, el embajador de EE UU en España, Eduardo Aguirre, ha aplaudido el éxito de la operación y ha añadido que "éste es un nuevo ejemplo de la excelente cooperación" entre España y Estados Unidos en materia de seguridad.
"Esta magnífica operación ha impedido que un gran jefe de la droga vuelva a operar en nuestros países en el futuro y es un duro golpe al azote que el narcotráfico ha provocado en nuestras sociedades", ha subrayado.
Las fuentes de la investigación también han recalcado la cooperación entre la Guardia Civil y el CNP, sin la cual "habría sido imposible esta operación".
En principio, no se han producido más detenciones junto a la de Edgar Vallejo-Guarín, aunque los investigadores no descartan que se puedan producir en lo sucesivo.
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