Trabajo apunta a la rotura de un tornillo como causa del accidente en el Mestalla

La Fiscalía de Valencia y la Inspección de Trabajo coinciden en que la caída del andamio y la placa de encofrado, que el lunes provocó la muerte de cuatro trabajadores en las obras del nuevo estadio del Valencia CF, se produjo por la rotura de un tornillo de gran tamaño.

El fiscal delegado de Siniestralidad Laboral, Jaime Gil, ha descartado que el accidente se debiera a la ausencia de medidas de seguridad. Según ha explicado, el siniestro no se produjo por "un error humano", sino por un "fallo técnico" en uno de los tornillos utilizados para sustentar la estructura.

Tras el accidente, el tornillo quedó debajo de la estructura caída, de unas dos toneladas de peso, ahora tendrán que extraerlo para practicar un análisis de su composición y comprobar si tenía defectos de fabricación.

El club, a la espera

De momento, las obras del nuevo estadio del Valencia permanecen paralizadas y ningún trabajador se encuentra dentro del recinto, que ocupa una superficie de 90.000 metros cuadrados en la avenida de las Cortes Valencianas.

El portavoz del Valencia CF, Alejandro Escribano, ha afirmado que las obras permanecerán paralizadas "al menos dos días" y se reanudarán "en la medida en que sea compatible" con la investigación del accidente laboral.

Escribano ha explicado que, además de la "investigación judicial", se ha emprendido la investigación dirigida por Inspección de Trabajo, y ha señalado que a ellas se suma otra que va a hacer la Unión Temporal de Empresas (UTE) "porque el club ha pedido una explicación convincente de lo que ha ocurrido". En relación con la seguridad de las obras, el arquitecto asesor en el proyecto ha asegurado que los trabajadores le han comentado muchas veces "que se sentían seguros en esa obra".

Funeral por los trabajadores

El funeral por José Vilanova Rosa, uno de los fallecidos en el accidente, tuvo lugar ayer en la localidad valenciana de Torrent. Familiares y amigos han despedido al joven de 22 años y nacionalidad española, después de que ayer por la mañana se le practicara la autopsia junto con el resto de víctimas del siniestro.

El entierro del otro joven de nacionalidad española, Enrique Pradas Franco, también se celebró ayer en el municipio de Bejís, Castellón. Los restos mortales de otro de los trabajadores, Luis Medardo Sinchiguano Toapanta, de 38 años, casado y con dos hijos de 9 y 11 años, serán repatriados a su país, Ecuador, según ha confirmado el cónsul de Ecuador en Valencia, Gabriel Monge. En el caso de Nelson Rocha García, el Ayuntamiento de Catarroja, Valencia, se ha puesto en contacto con la familia de este hombre de nacionalidad boliviana, de 44 años, casado y con dos hijos, para prestarles su ayuda.