Prisión sin fianza para el asesino de Mariluz
El padre de la niña asegura que será "muy difícil" rehacer su vida.- Santiago del Valle y su hermana recibidos con gritos de "asesino", palos y tomates a su llegada a la Audiencia Provincial de Huelva
La titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Huelva ha decretado esta madrugada prisión provisional comunicada sin fianza contra Santiago del Valle García, detenido el pasado martes por su implicación en la muerte de Mari Luz Cortés -la niña de cinco años cuyo cadáver apareció el pasado 7 de marzo en la ría de Huelva tras 54 días de desaparición-, al que se le imputan los delitos de asesinato y contra la libertad sexual.
El caso de los abusos a su hija se remontan a 1999 en Sevilla, cuando Santiago, con la connivencia de su mujer, Isabel García, llegó a acusar a un profesor de gimnasia del colegio de su hija de ser el responsable de los abusos que había sufrido la pequeña, que entonces tenía cinco años, los mismos que Mari Luz.
Sin embargo, el caso viró hasta el punto de que Santiago del Valle pasó de denunciante a acusado. Un Juzgado de lo Penal de Sevilla dictó sentencia contra él en 2002 y la Audiencia Provincial corroboró la decisión judicial en diciembre de 2005: dos años y nueve meses de prisión por abusos sexuales y falsedad documental. A los padres se les retiró la patria potestad de la hija que había sufrido los abusos y de otro hijo durante seis años. Los niños viven hoy con familias de acogida. El juez consideró probado que el "retraso mental" de los progenitores no era "eximente completa".
Este Juzgado ordenó en marzo de 2006 la averiguación de su paradero, una medida distinta a la orden de busca y captura, tal y como habían informado algunos medios.
¿Por qué no fue a la cárcel?
Sin embargo, se desconoce por qué Santiago del Valle no pisó la prisión. Ahora se ha sabido que huyó a Gijón y después se instaló en Huelva, en la casa de su hermana. Alguno de sus vecinos, como el tío de Mari Luz, conocía su pasado pederasta. Un dato que se convirtió en sospecha cuando Mari Luz desapareció el 13 de enero. 54 días después fue hallado su cadáver en la ría de Huelva.
La segunda sentencia por abuso sexual se produjo en diciembre de 2004 por el Juzgado Penal 4 de Sevilla, cuando ya había sido condenado por hechos similares. En este caso abusó de una niña de 9 años a la que sorprendió en la escalera de su vivienda. El 19 de julio de 2003 Santiago del Valle siguió a la niña cuando entró en el portal de su casa, la arrinconó y allí le hizo tocamientos. El acusado -que reconoció los hechos y aceptó la condena de dos años- desistió de su actitud cuando entró otra vecina en el portal. La ejecución de la sentencia se suspendió con la condición de que este individuo no cometiera delito alguno en tres años. Sin embargo, ya había sido condenado por los abusos a su hija.
Apertura de diligencias
Este embrollo judicial ha llevado a la fiscal jefe de Sevilla a ordenar la apertura de diligencias para averiguar por qué Santiago del Valle no está en la cárcel. Fuentes de la Fiscalía han explicado que quieren averiguar quién es responsable de que un condenado en dos ocasiones por un delito similar no pisara la cárcel. Si encuentran indicios, la Fiscalía denunciará el caso al Poder Judicial, ha informado la cadena SER.
Juan José Cortés, el padre de la pequeña supo "desde el primer día" que Del Valle estaba implicado en la muerte de la niña. Por temor a represalias, Del Valle se marchó a Granada tras la muerte de Mari Luz. Allí fue detenido e interrogado por los agentes, que lo dejaron en libertad por falta de pruebas. Se volvió a saber de él en Pajaroncillo, un pequeño pueblo de la sierra de Cuenca. El martes fue detenido en la estación de autobuses de Cuenca, ayer confesó el crimen y después de desdijo. Hoy ha sido trasladado a Huelva para declarar ante la juez.
"Va a ser difícil rehacer mi vida"
El padre de Mari Luz Cortés ha admitido hoy que va a ser difícil rehacer su vida, pero que se esforzará por seguir adelante con el apoyo de su familia, sus amigos y el cariño de todos. "El apoyo de toda la gente, de los medios de comunicación y de las administraciones públicas nunca se me va a olvidar", ha agradecido en una entrevista en la cadena SER. "Cuando paso por una calle y me reconocen los chavalines, se acercan con confianza y ven en mí alguien en quien confiar", ha relatado. "Eso supone para mí un motivo de alegría, que los niños puedan confiar en personas justas, que buscan la justicia", ha comentado. Juan José Cortés ha vuelto a apelar esta mañana a la calidad humana, como ya hizo ayer en la rueda de prensa que dio tras conocer la identidad del presunto asesino, y ha dicho que "en estos casos es cuando hay que demostrar lo que realmente somos". Está "satisfecho" de que al final se haya podido hacer justicia y que el responsable de acabar con la vida de su hija "pague lo que ha hecho". "Quiero seguir dando a mis otros dos niños todo el cariño y todo mi tiempo", ha dicho. Aunque Juan José ha agradecido el apoyo recibido desde todos los ámbitos de la sociedad, ha reconocido que "cuando pase el tiempo nos quedaremos solos mis hijos, mi mujer, yo y los familiares y los amigos más cercanos". Y, a pesar de ello, ha anunciado: "Con esfuerzo conseguiremos salir adelante".
Gritos, palos y dos periodistas heridos
Los detenidos por la muerte de Mari Luz Cortés llegaron a las 17.05 a la Audiencia Provincial de Huelva procedentes de la comisaría de Cuenca. Unas 600 personas los han increpado con gritos de "asesino". La situación ha llegado a tal tensión que las Fuerzas de Seguridad han tenido que actuar para impedir que los vecinos de la familia llegaran hasta el furgón policial. Lo que no han podido evitar es el lanzamiento de palos y piedras contra los vehículos donde iban Santiago del Valle y su hermana. Dos periodistas, un cámara de Cuatro y una reportera de Onda Cero, han resultado heridos por los impactos de los objetos.
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