Detenido en Pinto un peligroso delincuente que intentó atropellar a su hijo
'El Rana', de 27 años, había logrado escapar hasta en dos ocasiones anteriores
Daniel G.V., un delincuente madrileño de 27 años apodado El Rana, es padre de un niño de siete años. Desde que escapó de prisión en marzo del pasado año, va acompañado del pequeño, que raptó de la casa de sus bisabuelos, según la denuncia de la madre, ex compañera sentimental del delincuente. Tras casi cinco meses fugitivo, El Rana fue detenido el pasado viernes en Pinto (Madrid). Al intentar huir, aceleró el coche. Casi atropella al menor, custodiado por los agentes que perseguían al padre.
A continuación, arremetió contra los policías, que levantaron al niño para evitar su atropello. En el altercado, un agente resultó herido en la cara, al recibir un portazo intencionado. Los policías que finalmente lograron reducirle remarcaron la "gran agresividad" demostrada el delincuente. En anteriores ocasiones, El Rana había hecho gala de bravura y peligrosidad. El pasado 10 de mayo, consiguió quitarse los grilletes y escapar de la rampa de Plaza de Castilla, cuando era conducido a la prisión de Soto del Real acusado de varios robos.
Fugitivo por dos veces
En esa ocasión, el juez había decretado para él prisión preventiva con auto de ingreso en la cárcel. Según la Policía, el detenido contaba con multitu de antecedentes y tenía en vigor diez reclamaciones judiciales y policiales, ntre otras, ordenes de detención e ingreso en prisión y averiguaciones de domicilio. Tenía experiencia. Un año antes, logró evadirse de la enfermería de la prisión Madrid II.
El pasado marzo, un juzgado le había privado de comunicación y visita a su hijo de siete años, de quien iba acompañado en el momento de su detención. Cuando raptó al niño, "el menor lloraba y gritaba que no quería ir con él", según la denuncia de la madre, compañera sentimental de Daniel G. hasta 2003.
Largo historial
Las averiguaciones policiales le imputan, al menos, un robo con violencia cometido en agosto de 2005. Al volante de un coche que conducía junto a otros cómplices, El Rana se apoderó de 2.680 cajetillas de tabaco. Un año después, logró fugarse de la enfermería de Madrid II, donde cumplía prisión por ese delito. El Rana permaneció escondido entre la maleza desde las ocho de la mañana hasta bien entrada la noche, cuando pudo alejarse sin ser visto.
Daniel tenía en vigor 10 reclamaciones y contaba con 26 reseñas policiales a causa de otros robos con violencia o intimidación, con fuerza, hurto de vehículo, secuestro, amenazas, resistencia y desobediencia, entre otras. Además, el coche que conducía en el momento de la detención denunciado figuraba como sustraído, al igual que las placas. También llevaba permiso de conducir falso, igualmente sustraído, y con la fotografía cambiada.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.