Díaz de Mera asegura que su 'fuente' miente y pide un careo ante el juez

El comisario Enrique García Castaño, a quien el ex director general de la Policía Agustín Díaz de Mera identificó en una carta como la persona que le habló de la existencia de un supuesto informe que relacionaba a ETA con el 11-M, ha desmentido hoy este extremo en el juicio por la matanza en Madrid y ha asegurado que "nunca jamás" le dijo que la banda terrorista "tuviera una relación ni por asomo" con los atentados. En un escrito enviado al tribunal, Díaz de Mera asegura que García Castaño miente y solicita un careo con el comisario. "Ante tan flagrante cúmulo de falsedades, considero que contrastar las dos versiones de los hechos podría contribuir a demostrar la veracidad de la información que he proporcionado", solicita.

El responsable de la Unidad Central de Apoyo Operativo (UCAO) de la Policía en el momento de los atentados también ha explicado que Díaz de Mera le llamó el pasado 28 de marzo, después de declarar en el juicio y haberse negado a facilitar su fuente, para pedirle que se identificara como la persona que le habló de ese informe, apelando a su amistad. "Me dijo que estaba en una situación difícil y presionado políticamente", ha recordado García Castaño, que ha manifestado que dijo a Díaz de Mera que "quería ayudarle pero que no podía decir algo que no es cierto", ha destacado el testigo.

El ex jefe de la UCAO ha explicado que, en su opinión, el ex director general de la Policía "equivocó datos", ya que él le habló de un informe que "está aportado al sumario" y no establece relación alguna entre ETA y los terroristas islamistas.

Tras esta primera conversación con Díaz de Mera el 28 de marzo, García Castaño volvió a hablar con él al día siguiente, ha referido el testigo, que ha asegurado que en esta ocasión la conversación fue "más tensa". El eurodiputado del PP le dijo entonces que había hablado con el presidente del tribunal, Javier Gómez Bermúdez, y que éste le había prometido que iba a estar amparado y protegido. "Le dije que no podía entrar en ese juego porque soy un funcionario de policía", ha indicado García Castaño, que ha considerado que Díaz de Mera se valió de la amistad que le unía a él. Y ha agregado que no tiene "constancia cierta" de que el ex mando policial en la época del PP hablara con otros.

"Agustín, no hay ninguna relación"

García Castaño ha relatado que ya en septiembre de 2006, cuando Díaz de Mera mencionó por primera vez la existencia del supuesto informe, los datos ofrecidos por él al ex director general descartaban los vínculos entre ETA y el terrorismo islamista. "Cuando me preguntaba yo le concretaba datos, le decía: 'Agustín, no hay ninguna relación, no encontramos ninguna relación, no puede haber un informe roto o manipulado porque no existe esa relación", ha insistido el testigo. Así, ha descartado que se pidiera a un funcionario policial que introdujera cambios en un documento que establecía dichos vinculos o que se tomaran represalias contra un policía por negarse a hacerlo.

El 28 de marzo, Díaz de Mera se negó, durante su comparecencia ante el tribunal del 11-M, a desvelar la identidad de su supuesta fuente, motivo por el que se le abrió un procedimiento por desobediencia grave y se le multó con mil euros. Cuatro días después, sin embargo, decidió identificar a esa persona en una carta que el tribunal recibió el pasado día 3. En la misiva, Díaz de Mera cita al ex comisario general de Información Telesforo Rubio como la persona que encargó la elaboración del informe, a un agente identificado con el número 18.684 como la que lo redactó y a otro policía, el número 13.610, como la que lo manipuló para ocultar la relación de ETA con el 11-M. Díaz de Mera dice también en su carta que quien le comunicó a él todas estas circunstancias fue un antiguo responsable de la UCAO, Enrique García Castaño. Éste, por su parte, negó en una carta dirigida el pasado 30 de marzo a la Dirección General de la Policía todas las afirmaciones de Díaz de Mera.

Durante la sesión de hoy, García Castaño ha agregado que Díaz de Mera no le dio explicación de los motivos que le llevaron a mantener la postura contraria a las informaciones que él le ofrecía. Y ha subrayado, que lleva 32 años en el cuerpo "luchando contra el terrorismo" y que por su experiencia conoce que ETA ha aconsejado históricamente a sus presos no mantener ningún tipo de relación con personas procedentes de organizaciones radicales como los GRAPO, grupos anarquistas o incluso islamistas, ya que la banda terrorista considera que "no son de fiar" y pueden ser "infiltrados policiales". "Incluso hay algún documento al respecto y comentarios en los zutabes", ha añadido.

"Estoy dispuesto a ir a la cárcel por ti por revelación de secretos"

En el documento remitido al tribunal por Díaz de Mera y hecho público por el propio ex jefe policial poco después de la comparecencia de García Castaño, el eurodiputado del PP da su versión de sus conversaciones con el comisario desde su propia declaración ante el tribunal el 28 de marzo. En el escrito, fechado hoy pero que, según fuentes cercanas al eurodiputado, podría llegar mañana al tribunal, Díaz de Mera sostiene que, durante su declaración, el comisario "ha faltado en reiteradas ocasiones al juramento prestado". "Lo ha hecho cuando ha negado que me hubiera informado sobre la existencia de un informe que hablaba de las conexiones entre ETA y los islamistas", afirma Díaz de Mera. Y añade que el comisario tampoco se habría atenido a la verdad cuando "ha relatado la primera conversación que mantuvo conmigo la tarde del 28 de marzo". "(También) Lo ha hecho cuando ha puesto en mi boca palabras que nunca pronuncié relativas a la existencia de 'presiones políticas'. Y lo ha hecho cuando ha indicado que yo le pedí decir algo distinto de la verdad", añade.

"Lo cierto -escribe Díaz de Mera- es que en esa conversación del 28 de marzo me volvió a relatar los detalles relativos al informe en cuestión y que están fielmente reproducidos en mi escrito al tribunal fechado el 1 de abril y registrado el día 3 del mismo mes". Sostiene Díaz de Mera que es en esa conversación del 28 de marzo cuando, "por primera vez", el comisario le informa de que "el informe 'manipulado' está incorporado al sumario". "Lo cierto es que en la misma tarde del 28 de marzo sus primeras palabras fueron 'estoy dispuesto a ir a la cárcel por ti por revelación de secretos'", relata Díaz de Mera. "Posteriormente, en la segunda y tercera conversación telefónica que mantuvimos, se produce un cambio y me dice que diga todo lo que quiera y haga lo que quiera menos facilitar su identidad", prosigue.

El ex director general de la policía refiere entonces que en la tarde del 29 de marzo se produce "un cambio radical de actitud" en el comisario y que éste le indica que "a la mañana siguiente recibirá el asesoramiento de un juez y que me comunicará lo que decide". "En esta conversación se manifestó incorrecto, excitado y me llegó a preguntar, cuando le recordé si quería que repitiera el relato sobre el informe que me había reiterado la tarde anterior, si le estaba grabando", asegura Díaz de Mera. El escrito afirma asimismo que en la tarde del 30 de marzo García Castaño llamó a uno de los hijos del propio Díaz de Mera para "decirle que le habían recomendado no tener comunicación alguna" con él y que "lo sentía mucho".

La "fuente" de Díaz de Mera asegura que jamás relacionó a ETA con el 11-M