La violencia callejera dispara el pesimismo de los vascos ante el proceso del paz
Atacada con artefactos incendiarios la sede del PSE y UGT en la localidad navarra de Estella
Los incidentes de violencia callejera y el endurecimiento del discurso público de los líderes de Batasuna han provocado un “enfriamiento” en el optimismo de la sociedad vasca al respecto del proceso para el fin del terrorismo. Tanto es así, que el 64% de los ciudadanos de esa comunidad autónoma cree “perfectamente posible” que la organización terrorista ETA vuelva a matar. Además, un tercio ya no confía en que el alto el fuego que asumió el pasado mes de marzo sea el primer paso hacia su desaparición, según se desprende del Euskobarómetro, un estudio sociológico semestral realizado por la Universidad del País Vasco.
Tan solo el 35% de los vascos expresa mucho o bastante confianza en que el proceso actual sea la puerta al fin del terrorismo, mientras que el 42% no cree que ETA vaya a abandonar las armas. El 62% se muestra optimista ante la evolución de este problema, frente al 86% del anterior estudio. De igual forma, el 50% expresa su rechazo frontal a ETA, frente al 61% del anterior estudio.
Precisamente esta madrugada se han producido dos nuevos incidentes de violencia callejera. En la localidad navarra de Estella, donde varios desconocidos han lanzado artefactos incendiarios contra el edificio que emplean como sede el sindicato UGT y el partido socialista. Además, en Burlada han sido atacados dos cajeros automáticos, que han sufrido daños leves.
La delegación del Gobierno en Navarra ha expresado su “rotunda” condena de estos actos de violencia callejera, que ha considerado “tan incívicos y antidemocráticos como estériles, porque no van a condicionar ni amedrentar a ninguna institución ni a ningún agente político, económico o social”.
“Que estos reprobables actos sean estériles no quiere decir en ningún caso que deban quedar impunes”, ha asegurado un portavoz de esta institución, que ha agregado que “la denominada kale borroka es un escollo evidente para un final dialogado de la violencia y así lo debe interiorizar ya la izquierda abertzale en su conjunto”.
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